BOGOTÁ (apro).- El presidente electo Enrique Peña Nieto se comprometió aquí a seguir de cerca las negociaciones de paz en Colombia, como parte de su interés en retomar la tradición mexicana de participar en este tipo de procesos, anunció hoy aquí Luis Videgaray, coordinador del equipo de transición. “La paz en Colombia es muy importante para México por el efecto que esto tiene en la actividad del crimen organizado en toda la región y, por lo tanto, también tenemos un interés muy concreto en que este proceso sea exitoso”, dijo. En declaraciones a reporteros en el presidencial Palacio de Nariño, donde Peña Nieto se reunió con el mandatario colombiano Juan Manuel Santos, Videgaray sostuvo que el futuro gobernante “quiere estar cerca, acompañar, respaldar y ser un factor de colaboración para que este proceso de paz que es tan importante para Colombia, pero también para toda la región, y eso incluye a México, sea muy exitoso”. El priista recordó que México tiene una gran tradición de coadyuvar en la paz de la región, como ocurrió en los años ochenta en Centroamérica, con el Grupo Contadora, y en los diálogos de paz en los noventa. “Y lo que está haciendo el presidente electo es actuar conforme a esa tradición y también (es) un gesto de solidaridad con un pueblo como es el colombiano, que es un pueblo amigo de México y que merece estar en paz”, acotó Videgaray. El presidente Santos anunció el martes 4 que el mes próximo su gobierno iniciará en Oslo, Noruega, un diálogo de paz con la guerrilla de las Fuerzas Armadas Revolucionarias de Colombia (FARC), que pretende poner fin al conflicto armado interno que vive este país desde hace 48 años, y el cual ha dejado más de 92 mil muertos y unos 5 millones de desplazados. Frente a la iniciativa, que fue apoyada por América Latina, Estados Unidos, Europa, Naciones Unidas (ONU) y el propio Papa Benedicto XVI, el gobierno del presidente Felipe Calderón marcó distancia y guardó silencio, como destaca Proceso en su edición 1872 de esta semana: “A diferencia de otros presidentes, Felipe Calderón no felicitó al mandatario colombiano Juan Manuel Santos por el inicio de los diálogos de paz con las FARC. Para él, dicen los analistas, esto último significa negociar con narcotraficantes que presuntamente mantienen vínculos con los cárteles mexicanos de la droga. “La actitud de Calderón es criticada por políticos y académicos colombianos, quienes advierten que México debería acompañar dicho proceso de paz, pues lo que se acuerde en materia de narcóticos le repercutirá directamente”. En la improvisada conferencia, se le preguntó a Videgaray su opinión sobre el hecho de que Calderón haya omitido respaldar las negociaciones de paz con las FARC que iniciará el gobierno de Colombia. El coordinador del equipo de transición respondió evasivo: “La posición del presidente electo (Peña Nieto) es muy clara, de apoyo total al proceso”. Los diálogos entre las FARC y el gobierno de Colombia tendrán como países garantes a Cuba y Noruega, y como acompañantes a Venezuela y Chile.