MONTERREY, N.L. (apro).- En su primera gira de trabajo presidencial, Enrique Peña Nieto anunció aquí la construcción de la Línea 3 del Sistema de Transporte Colectivo (Metro) y del plan hidráulico Monterrey VI que, aseguró, beneficiarán a miles de habitantes y generarán prosperidad a la entidad, golpeada por la inseguridad. Acompañado del secretario de Comunicaciones y Transportes, Gerardo Ruiz Esparza, y del director general de la Comisión Nacional del Agua (Conagua), David Korenfel, el presidente dijo que los estudios para los dos proyectos deberán ser emprendidos de inmediato para que arranquen a la brevedad. Sin aportar mayores detalles, Peña Nieto subrayó que acudía a Nuevo León a cumplir el compromiso que hizo en campaña, en el sentido de respaldar con recursos la edificación de la ramificación del transporte colectivo que, tentativamente, en esta etapa se prolongará hacia el norte de la capital hasta el municipio de San Nicolás, para continuar hasta Apodaca en una etapa posterior. “El estado y una zona metropolitana como la de Monterrey, sin duda empiezan a tener complicaciones en el transporte y las comunicaciones, por eso tiene que modernizar su infraestructura en materia de transporte masivo, y por eso hice el compromiso de llevar a cabo el proyecto”, recordó el mexiquense. Durante el segundo evento del día, efectuado en el Parque de Investigación e Innovación Tecnológica (PIIT) en Apodaca, el jefe del Ejecutivo federal también se refirió a Monterrey VI, que consta de un acueducto de 520 kilómetros que cruzará los estados de San Luis Potosí, Veracruz, Tamaulipas y desembocará en Nuevo León, con una inversión de unos 14 mil millones de pesos. “El proyecto garantizará mayor abasto de agua a la zona metropolitana de Monterrey, un proyecto de gran alcance y envergadura. Va a ser más desafiante, aun que la inversión del proyecto, su construcción. Traerá agua a través de un acueducto de 520 kilómetros que transita por cuatro estados”, previó. Peña Nieto se dirigió luego a Ruiz Esparza y Korenfel Federman para señalar que los “instruía” en ese momento para que, “en coordinación estrecha” con el gobernador Rodrigo Medina iniciaran “de inmediato” los trabajos de proyecto e inversión para que se puedan materializar las obras. En su mensaje, el presidente se congratuló de visitar Nuevo León una tierra que, sostuvo, es un ejemplo de trabajo y fortaleza, pese a que recientemente “ha tenido problemas de imagen distorsionada” derivados de la inseguridad. Al final de su discurso en este segundo y último evento, Peña Nieto consideró necesario resaltar las buenas noticias, y enseguida reiteró su compromiso de incrementar la calidad de vida de los mexicanos. “Las buenas noticias hay que replicarlas, sentirse orgullosos de ellas, no puede ser que las malas sean las que marquen a una región, un estado, un país; hay tanto de que sentirse orgulloso y más de lo que vamos a realizar”, arengó. “Hay una gran ventana de oportunidad, porque como lo dije en mi toma de posesión, lo más importante es que tengamos claro a dónde queremos llegar, el rumbo claro, la forma en la que habremos de hacerlo, compromiso por llevar a cabo estas acciones. Estoy seguro y lo reitero que habrán de venir tiempos mejores para todo el país”, concluyó. Peña Nieto acudió al PIIT para inaugurar cinco centros de investigación, por un monto de casi 40 millones de dólares. En el acto estuvieron el secretario de Economía, Ildefonso Guajardo, y el de Educación Pública, Emilio Chuayfett. Por la mañana, el presidente apadrinó la sexta generación de 700 cadetes de la Fuerza Civil que actualmente ya conforman una corporación de 2 mil 700. En el evento, efectuado en el Parque Fundidora, mencionó que Nuevo León es un ejemplo de la renovación de una corporación policiaca entera, como es la Fuerza Civil y, después de elogiar los resultados en la entidad en la lucha contra el crimen, se comprometió a enviar a funcionarios de su gabinete de seguridad a revisar cada mes para darle seguimiento al trabajo de la corporación y medir sus avances. En la ceremonia estuvieron presentes, entre otros, el secretario de Gobernación, Miguel Ángel Osorio Chong; el secretario de la Defensa Nacional, Salvador Cienfuegos; de Marina, Vidal Soberón, y el subsecretario de Seguridad, Manuel Mondragón. Como ya es costumbre, los recorridos de Peña Nieto estuvieron resguardados de manera permanente por un amplio círculo de seguridad del Ejército y del Estado Mayor Presidencial (EMP).