En estado crítico, cuatro heridos por explosión en Tlaxcala

lunes, 18 de marzo de 2013 · 20:07
MÉXICO, D.F. (apro).- La Secretaría de Salud del estado de Tlaxcala reportó hoy que cuatro de las 154 personas que resultaron heridas el pasado viernes 15 durante la explosión de juegos pirotécnicos en la comunidad de Jesús Tepactepec, municipio de Nativitas, pasaron de estado grave a crítico. Jesús Fragoso Bernal, titular de la dependencia, dijo que la cifra de muertes se mantiene en 17 hasta el momento y 28 personas permanecen en estado grave, mientras que dos niños de nueve y 10 años ya fueron dados de alta del Hospital Infantil de Tlaxcala. En total, refirió Fragoso Bernal, 154 personas resultaron heridas el viernes al explotar una camioneta cargada con juegos pirotécnicos. De ésas, 74 ya fueron dadas de alta, 80 continúan hospitalizadas, cuatro de ellas en estado crítico, 28 graves y 48 se reportan estables. Del total de lesionados, 33 son menores de edad, 22 de ellos niños y 11 niñas. Hasta el corte realizado a las 13:00 horas de este lunes, la cifra oficial de muertos es de 17, de los que nueve fallecieron en el lugar, seis en los hospitales de Tlaxcala, Puebla y el Distrito Federal donde fueron atendidos y dos más fallecidos durante los traslados. El deceso más reciente fue el de un niño de 11 años quien murió en un hospital de la capital del país, el domingo pasado. Fragoso Bernal desestimó la creación de un hospital para atender a quemados en Tlaxcala porque, dijo, se convertiría en un “elefante blanco” porque hay comunicación aérea con el Centro Nacional de Investigación y Atención a Quemados en la Ciudad de México, instancia que brinda atención a nueve de los heridos del viernes pasado. Por otra parte, a raíz de esta tragedia, el titular del Instituto Estatal de Protección Civil (IEPC), Mateo Morales Báez, hizo un llamado a las autoridades eclesiásticas a fin de que disminuyan y regulen el uso de la pirotecnia durante las celebraciones religiosas que se realicen en el estado. Actualmente, reconoció, hay una nula regulación en el consumo y venta de pirotecnia que es “utilizada por costumbres y tradiciones” en las comunidades religiosas de cada municipio.

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