MÉXICO, D.F. (apro).- Maritza Díaz Hernández, expareja de Enrique Peña Nieto, pidió cinco minutos de diálogo al presidente de la República para llegar a un acuerdo en beneficio de Diego, el hijo que ambos procrearon. “Yo lo que quiero es un ‘hablemos tú y yo’, llegar a un acuerdo tú y yo”, dijo la noche de ayer en entrevista con Carmen Aristegui en CNN. En clara referencia al Pacto por México, Díaz subrayó que si públicamente Peña Nieto promueve el diálogo y logró un acuerdo con tres fuerzas políticas, “¿por qué no se logra para tu hijo? No creo que sea tan difícil acordar algo”, agregó. Horas después de haber subido a Youtube el video al que tituló “Justicia para tu hijo”, la expareja del mexiquense apeló a la “madurez y sensatez” del Ejecutivo, a quien pidió llegar a un acuerdo y a una conciliación. “Yo quiero cinco minutos para hablar con él y que acordemos lo mejor para nuestro hijo”, señaló Maritza Díaz. Asimismo, explicó que hay dos juicios de controversia familiar con Enrique Peña Nieto. Uno promovido por el presidente en el Estado de México, en agosto de 2012, y otro promovido por ella en el Distrito Federal. Al respecto, manifestó que es una irregularidad que un juez mexiquense haya asumido competencia en el tema, “cuando mi hijo, yo y Enrique vivimos en el Distrito Federal”. Además, agregó, la justicia mexiquense no le permite hablar de su caso, ya que el juez estableció “una cláusula en la que me prohíben hablar del proceso en pro del bienestar de Diego”. Añadió: “Si yo viera que en verdad se protege al niño, no habría problema, pero no es así… En el DF lo intentaron, pero aquí no existe ese artículo”. Sobre el video, Díaz dijo que determinó hacerlo porque existe una sentencia interlocutoria del 8 de marzo de 2013, a favor del niño, que no ha sido cumplida después de tres meses. Asimismo, subrayó el distanciamiento de 17 meses de Enrique Peña. “En enero (2013) el niño me pidió hablar con su papá, lo busqué, y no ha habido respuesta”. No obstante, señaló que “a lo mejor” el presidente ni siquiera está enterado de cómo van los procesos. “Quizás ni siquiera sabe que hay una sentencia”, apuntó. Lo que pide, dijo, es que Peña Nieto se acerque a su hijo, y para ello, sostuvo, no tiene que haber una convivencia pública. En el video que ayer empezó a circular en las redes sociales, Martiza exige al mandatario que atienda sus responsabilidades para con el menor. Las prestaciones que solicita Díaz Hernández, según detalla, son “desde mi punto de vista mínimas, indispensables: la equidad, igualdad, la no discriminación, la filiación, su nombre, sus derechos de la niñez, su estabilidad física y emocional”. En el video de 5 minutos con 27 segundos, Maritza informa que ha acudido a la Comisión Nacional de los Derechos Humanos (CNDH), a la Procuraduría General de la República (PGR), al Consejo Nacional para Prevenir la Discriminación (Conapred), al Senado, a la Embajada de Estados Unidos en México –porque su hijo es ciudadano estadunidense, aclara–, y no ha tenido respuesta. Dice que tanto en su demanda como en la que inicio Peña “he notado que la justicia está a favor o parcialmente a favor de Enrique, vulnerando nuestros derechos, tanto el mío como el de mi hijo, que incluso están en la Constitución”.