VILLAHERMOSA, Tab. (apro).- La Procuraduría General de la República (PGR) informó hoy que el exgobernador de Tabasco, Andrés Granier Melo, permanecerá retenido en sus instalaciones hasta que concluyan las diligencias ministeriales relacionadas con la averiguación previa UEIORPIFAM/AP/078/2013 en la que se encuentra implicado, junto con varios de sus excolaboradores, y se defina su situación jurídica. En un comunicado, la dependencia que dirige Jesús Murillo Karam dio a conocer también que el exmandatario será trasladado a la ciudad de Tabasco –no específico la hora--, para que comparezca, en cumplimiento de una solicitud de colaboración enviada este jueves por la Procuraduría General de Justicia de esa entidad del sureste mexicano (PGJE) y a petición “voluntaria” del propio Granier. “La PGR dará cumplimiento a ambas solicitudes a fin de garantizar la seguridad del exgobernador y su presentación ante la PGJE en un marco de plena observancia al debido proceso y a los derechos humanos”, subrayó la PGR. Ayer, antes de presentarse en la PGR, Granier Melo declaró a los medios que no acudiría a declarar a la Procuraduría de Tabasco porque no tenía las garantías suficientes y porque también se encontraba amenazado de muerte. Ahora, sin embargo, a decir de la PGR, el exgobernador cambió de opinión y cumplirá con la diligencia ministerial sobre la indagatoria iniciada por el presunto desfalco de mil 900 millones de pesos suministrados a su gobierno por la Federación y por los 85 millones de pesos encontrados en una bodega de su extesorero José Manuel Saiz Pineda, actualmente preso. Granier Melo ingresó ayer a las 10 de la mañana a las oficinas de la Unidad Especializada en Investigación de Operaciones con Recursos de Procedencia Ilícita y de Falsificación o Alteración de Moneda de la SEIDO, donde testificó durante casi 13 horas. La diligencia se suspendió poco después de las 12 de la noche y se reanudó esta mañana y concluyeron después del mediodía. El MPF cuenta con 48 horas de plazo para definir la situación jurídica de Granier. Antes de que la PGR emitiera el comunicado, el gobernador de Tabasco, el perredista Arturo Núñez, sostuvo una reunión privada con los subsecretarios de Gobierno y de Enlace Legislativo de la Secretaría de Gobernación, Luis Miranda y Felipe Solís Acero. Por separado, el gobernador Arturo Núñez rechazó que Granier Melo sea un perseguido político y que someter ante la justicia a los responsables del desfalco, “no es una cuestión de dichos”, ni mucho menos “una revancha política”. “Esto no es una cuestión de partidos o de campañas anti-partidos, es un asunto de honestidad y deshonestidad en el manejo de recursos públicos”, señaló. Su predecesor, dijo, está en su derecho de decir los alegatos que convengan en su defensa, pero aclaró que tendrá que probarlo ante las instancias competentes. “Tendría que probar que no hay desviación de recursos, que no hay cuenta concentradora, que no hay retiros en efectivo de la cuenta Bancomer, o que el dinero llegó oportunamente para la ejecución de los programas”, manifestó. Los delitos por los que actúan la PGR y la PGJE contra los implicados en el quebranto de las finanzas públicas del estado, puntualizó, son esencialmente los mismos: peculado y manejo indebido de recursos. Sin embargo, apuntó que “es muy probable” que la PGR acredite otros delitos de orden federal, derivado de las investigaciones de las instituciones de inteligencia financiera. Granier Melo está citado para declarar ante la PGJE este viernes a las 18:00 horas.