VILLAHERMOSA, Tab. (apro).- El abogado Eduardo Luengo Creel aseguró que Andrés Granier Melo “no pretende evadir la ley”, y dijo que el exmandatario ya rindió su declaración sobre las imputaciones que le hace la Procuraduría General de Justicia de Tabasco (PGJE) a través del telegrama enviado la noche del pasado miércoles 19. Aunque la PGJE aclaró anoche mismo que dicho telegrama no tiene efectos jurídicos, Luego Creel insistió que el artículo 49 del Código de Procedimientos Penales de Tabasco establece que uno de los medios legales de comunicación es el telégrafo, “legítimo y legal” para realizar manifestaciones. En consecuencia, dijo que, en ejercicio de ese derecho, el químico Andrés Granier “declaró ante la Procuraduría con dos fines”: para negar la acusación que la PGJE “pretende formularle” y para rechazar su participación “en cualquier desfalco”. El exgobernador “es ajeno a los hechos que investiga la Procuraduría, manifiesta su inocencia y, en este sentido, se presentó por escrito su declaración, haciendo uso también de un derecho constitucional”, agregó Luego Creel. En entrevista concedida a un noticiero de radio local, el abogado litigante reiteró que su cliente es inocente y que no comparte la tesis de que, como gobernador, Granier Melo debió estar enterado de lo que hacían sus colaboradores con el manejo de los recursos públicos. Es como “si una cajera defrauda a Banamex y tendría que ir preso el director de Banamex”, comparó, y resaltó que los órganos técnicos que revisan las cuentas públicas –la Contraloría del estado y la Auditoría Superior de la Federación– nunca presentaron “un extrañamiento ni una petición de aclaración” al exgobernador. “Las cuentas estaban correctas y los números que se presentaron en ese entonces correspondían a lo que estaba soportado y era lo correcto”, aseguró. Informó que la tarde de este jueves el exmandatario priista sería sometido a una operación para colocarle un catéter por una lesión detectada en su corazón, y que desea salir bien para ratificar su declaración sobre “su ajenidad” a las acusaciones en su contra. “A eso vino a México y espera salir bien librado de estas acusaciones, porque él es ajeno a las mismas”, reiteró. El estado anímico de Granier Melo, dijo, es de preocupación y de entereza “para enfrentar, por un lado, el tema de la afección cardiaca y, por otro, aclarar las acusaciones que pretende fincarle la Procuraduría”. Respecto de la versión de que el exgobernador regresó de Miami a México porque estaban por cancelarle la visa en Estados Unidos, respondió: “No, no es correcto, él pudo haber enfrentado la cancelación de la visa con un juicio administrativo en Estados Unidos. Pudo haber esperado allá que se llevara a cabo algún eventual juicio de extradición, enfrentarlo y ganarlo; no obstante eso, decidió venir. Así lo comunicó públicamente y para eso está aquí en la ciudad de México”. Sobre la negativa de la PGJE de acreditar el telegrama del exgobernador como comparecencia y declaración sobre la indagatoria abierta en su contra, Luengo Creel dijo que con eso quedó constancia expresa del deseo de Granier Melo de declarar, y que también se presentó en la oficialía de partes de la PGJE. “De tal manera que ha quedado acreditada la voluntad del químico de declarar en la Procuraduría, de negar los cargos que pretenden formularle y con ello manifestar que no tiene el mínimo deseo de evadir a la acción de la justicia”, puntualizó. En relación con la posibilidad de que el exmandatario venga a Tabasco a declarar personalmente una vez que mejore su salud, Luengo Creel replicó que todavía está sujeto a la determinación de las autoridades federales por un juicio de amparo. “La intención del químico es comparecer, pero no ante un clima de linchamiento político como el que ha generado el gobierno del estado en su contra”, concluyó.