MÉXICO, D.F. (apro-cimac).- Activistas, académicas y feministas, entre ellas Julia Monarrez, Gloria Careaga, Alda Facio y Patria Jiménez, hicieron un llamado a los magistrados de la Octava Sala Penal del Tribunal Superior de Justicia del Distrito Federal (TSJDF) para que emitan una sentencia con enfoque de género en el caso de Clara Tapia Herrera, presa desde hace casi dos años por el delito de “corrupción de menores”. Además, organizaciones como la Red de Investigadoras Por la Vida y la Libertad de las Mujeres y el Observatorio de Género y Erradicación de la Violencia contra las Mujeres pidieron a los magistrados Irma Guadalupe García Mendoza, Rosalinda Sánchez Campos y José Guadalupe Carrera Domínguez sentar un precedente a favor de las mujeres víctimas de violencia. La Octava Sala Penal del TSJDF analizará este miércoles el caso de Clara, expareja de Jorge Antonio Iniestra Salas –conocido como El monstruo de Iztapalapa–, para determinar si el juez Casiano Carlos Morales García debe valorar la pertinencia de dejar en libertad a la mujer que pasó de víctima de violencia a “victimaria” en contra de sus propias hijas. En una carta abierta, las organizaciones civiles y las expertas recordaron que el próximo 6 de septiembre Clara cumplirá dos años en prisión, acusada injustamente de “corrupción de menores por omisión”, es decir, por no haber impedido que Iniestra Salas la despojara de su dinero y bienes, violara a sus dos hijas –una de las cuales fue asesinada– y golpeara y explotara laboralmente a su hijo. “Consideramos importante que la valoración respecto de la situación de Clara Tapia sea como víctima sobreviviente y no como cómplice de su agresor, pues en el proceso ha sido demostrada su inocencia mediante las pruebas que han desvanecido uno a uno los razonamientos que en un principio sirvieron para justificar su encarcelamiento”, se lee en el texto. Al conocerse el caso de Clara, medios de comunicación e instituciones de justicia y contra la violencia calificaron a la mujer de “mala madre”, cuando en realidad ella trabajaba y daba todo su dinero a su agresor a cambio de poder ver a sus hijas, a quienes El monstruo de Iztapalapa mantenía secuestradas. En la audiencia de este miércoles, los magistrados revisarán si deben ordenar al juez que valore las pruebas aportadas por la defensa de Clara antes de que concluya el proceso. De ser así, el impartidor de justicia podría ordenar su liberación y evitar que siga en la cárcel por un delito que no cometió. La Asociación Nacional de Abogados Democráticos (ANAD), que litiga el caso, ha demostrado que Clara no fue cómplice de Iniestra Salas, por lo que ella no tiene responsabilidad en los hechos, como en un inicio declaró su hija mayor, Gabriela, quien aseguró que su madre tenía conocimiento de los abusos sexuales a los que eran sometidas ella y su hermana Rebeca por parte del sujeto, y que no había hecho nada por impedirlo.