No hay vuelta atrás en eventos climáticos extremos: especialistas

miércoles, 2 de octubre de 2013 · 14:10
MÉXICO, D.F., (apro).- Los eventos climáticos extremos --huracanes, sequías, ondas de calor, precipitaciones severas y el incremento del nivel del mar—continuarán y aumentarán en intensidad en los siguientes 100 años, advirtió Blanca Mendoza Ortega, investigadora del Departamento de Ciencias Espaciales del Instituto de Geofísica (IGf). Y subrayó que en ello “no hay vuelta atrás”. Según el primer volumen del V Informe (AR5) del Panel Intergubernamental de Cambio Climático (IPCC, por sus siglas en inglés), en el que participó Mendoza Ortega, hasta la década de 1970 se tuvo claro el aumento de huracanes intensos, de categoría 4 y 5, y a partir de entonces en el Atlántico Norte, que corresponde a México, “se observa un incremento en el número de meteoros”. De acuerdo con las proyecciones de los especialistas, en los próximos 100 años se prevé que además de incrementarse los huracanes en ese océano, aumenten en el Pacífico Norte Occidental, en las costas de Asia. El informe también señala que de 1950 a la fecha hay una disminución en el número de días y noches fríos, y un aumento de los días y noches cálidos. Lo mismo ocurre con las ondas de calor en grandes partes de Europa, Asia y Australia, que aún no se reflejan en América. Las alzas también se reflejan en la frecuencia y cantidad de precipitaciones “severas”, en regiones como Europa y Norteamérica, incluido México, sobre todo en el noroeste y el sur del territorio nacional. “En el futuro, en la mayoría de las latitudes medias y regiones tropicales húmedas, habrá un aumento” de precipitaciones severas, señala la investigadora, única mexicana que participó en el Grupo 1 Ciencia Básica, formado por 259 especialistas, 209 autores y 50 revisores de 39 países, como autora principal de uno de los capítulos del informe. En relación con el número y duración de las sequías, la especialista de la UNAM refiere que éstas se registran en mayor cantidad a escala regional y en la global el fenómeno no es tan claro. Sin embargo, a finales del siglo los modelos señalan un incremento de ese problema en todas partes, apunta. La incidencia y magnitud de los incrementos en la elevación del mar, serán muy probables para finales de la centuria, mientras que en las últimas tres décadas las temperaturas han sido las más calientes desde 1850. Según Mendoza, en el hemisferio norte el periodo de 1983 a 2012 es, con probabilidad, el más caliente de los últimos mil 400 años. “La temperatura realmente ha subido; de 1880 a 2010, se ha incrementado considerablemente, en alrededor de 0.85 grados centígrados y en México, en el último siglo, ha sido entre 0.5 y un grado, sobre todo en el norte y centro del país”, afirma. Además, la investigadora advierte que los efectos del cambio climático continuarán y para finales del siglo habrá un aumento de temperatura de hasta de 0.7 grados más sobre el promedio de los últimos 30 años. Ello implica, afirma, una continuación y aceleración del derretimiento de glaciares y el aumento del nivel del mar. En cuanto a los factores que inciden en los cambios del sistema  climático, sostuvo que no hay duda alguna de que en su mayoría se deben a la emisión de contaminantes y al cambio del uso del suelo, principalmente a la deforestación. Otra razón, que es mínima, es por causas naturales como el vulcanismo o cambios en la radiación solar, por ejemplo, así como a la dinámica interna del sistema climático, como El Niño, fenómeno que influye en los cambios de temperatura del planeta. La experta afirma que se estima que es sol tenga una reducción en su actividad y su radiación en las próximas décadas, pero no será suficiente para disminuir de manera sustancial el incremento de temperatura causado por la humanidad. En todo el planeta, advierte, “habrá más eventos extremos, de todo tipo”, algunos no tendrán precedentes y otros durarán por siglos. Por ello, asegura que para limitar–no revertir, porque ya no es posible– el cambio climático, se necesitará una política sostenida y sustancial de reducción de los gases de invernadero de las naciones,  impulsar el uso de energías renovables y en lo individual separar la basura, no desperdiciar el agua ni la energía eléctrica.

Comentarios