VILLAHERMOSA, Tab. (apro).- Una semana antes de dejar la gubernatura, Andrés Granier Melo desvió 215 millones de pesos del Fondo Nacional de Desastres Naturales (Fonden) para pagar deudas y asesorías. De acuerdo con las auditorías a la cuenta pública 2012, entregada al Congreso de la Unión la semana pasada, los 215 millones del Fonden fueron depositados a una cuenta del gobierno del estado para atender la emergencia que sufrió Tabasco a finales de 2011. No obstante, el 24 de diciembre de 2012, una semana antes de que Granier concluyera su mandato, el dinero fue transferido a otras cuentas sin autorización del Comité Técnico que operaba el Fideicomiso. “El gobierno del estado de Tabasco destinó los recursos para el pago de servicios de diferentes dependencias estatales, como son: servicio telefónico, adquisición de vales de despensa, comisiones financieras, servicio de traslado de valores y fondos, energía eléctrica, alquiler de equipos y muebles, mantenimiento y reparación de equipo de transporte, gastos de orden social, adquisición de material de limpieza, servicios de consultoría y asesoría, pago de auditoría, entre otros”, dice el informe de la Auditoría Superior de la Federación (ASF). A dos años de la evaluación de los daños ocurridos en 2011, el gobierno estatal no realizó las obras concertadas con sustento en el convenio de coordinación suscrito con la Federación, “lo que ha ocasionado un impacto negativo en la población afectada”, destaca. Además, añade, el exgobernador priista aplazó la construcción de obras prioritarias y nunca las concluyó, y prometió fondos que nunca se aportaron o cuyos gastos no han sido comprobados. La ASF refiere que desde el 7 de diciembre de 2010 se entregaron a Tabasco 63.9 millones de pesos para 14 obras prioritarias contra las inundaciones. Sin embargo, el Comité Técnico autorizó que se concluyeran hasta 564 días después del plazo original, pero aun así nunca se terminaron. Esto, menciona, impactó “negativamente a la sociedad civil que resultó afectada por los desastres naturales ocasionados en el estado de Tabasco”. Otra observación al gobierno de Granier es que nunca aportó los 48.6 millones de pesos que había comprometido al Fonden y además canceló 40 obras y 679 acciones para las cuales el gobierno federal destinó 56 millones. Y aunque los recursos no se usaron para lo que fueron destinados, el exgobernador priista no los reembolsó al gobierno federal. El Comité Técnico del Fonden local tampoco ha logrado comprobar el destino de más de 62 millones de pesos transferidos al Fondo de Contingencia del estado de Tabasco. El mal manejo de los recursos para realizar obras de mitigación y ayudar a los habitantes afectados por los fenómenos naturales también involucra a la Secretaría de Hacienda y Crédito Público (SHCP), la Comisión Nacional del Agua (Conagua) y la delegación en Tabasco de la Secretaría de Comunicaciones y Transportes (SCT), según la ASF.