MÉXICO, D.F., (apro).- En un hecho sin precedentes, en las redes sociales ha surgido un movimiento social en defensa de los ocho militares implicados en la masacre de Tlatlaya. Con el hashtag#Yosoy126, dicho grupo está convocando a las fuerzas castrenses y a la ciudadanía en general a participar en una marcha el próximo jueves 11 del Zócalo capitalino a la residencia oficial de Los Pinos. De acuerdo con la convocatoria, la detención de los militares que intervinieron en la masacre es una injusticia realizada por los altos mandos castrenses “sólo para quedar bien”. En el sitio Charge.org se subió una petición incluso para abogar por los militares implicados en el caso Tlatlaya. “No es justo que castiguen al soldado por matar criminales”, precisa la petición realizada a través del sitio Change.org. Hasta el momento, 262 personas han firmado a favor de que los integrantes del Batallón 102 de Infantería sean liberados, pues las víctimas, afirman, “eran criminales”. Militares en activo y retirados y familiares de éstos también han hechos uso de las redes sociales para recriminar a los altos mandos de la Secretaría de la Defensa Nacional (Sedena) su actitud. En algunos de esos mensajes acusan de “traición” al titular de la dependencia, Salvador Cienfuegos, por usar como “carne de cañón” y llevar a juicio a los militares que intervinieron en el operativo realizado en la comunidad de San Pedro Limón, el pasado 30 de junio, y en el que, ahora se sabe, fueron fusilados 22 presuntos delincuentes. La Procuraduría General de Justicia Militar (PGJM) investiga a 25 elementos por esos hechos, aunque sólo tres fueron acusados de homicidio y cinco más por infracción de deberes.