"La vida es un océano lleno de espinas": Aute en México
MÉXICO, D.F. (apro).- Previo a su recital en el centro cultural Roberto Cantoral, como parte de su visita en la Ciudad de México, el cantautor hispano Luis Eduardo Aute conversa con Apro y reflexiona sobre los temas fundamentales de su existencia.
–¿Cómo se encuentra Luis Eduardo Aute?
–Pues acá, tosiendo.
–Será por el smog de la Ciudad de México.
–No, no, es por el cigarrillo que me acabo de fumar en un apartado del hotel que me lo ha permitido.
–Parece que día a día los seres humanos reprimimos más al prójimo y sus derechos.
–Ya no nos permitimos nada los unos a los otros. Hemos pasado de ser Homo sapiens a Homo domesticus, o sea, hombres domesticados. Así que estoy, a sus órdenes.
–¿Qué significa la vida para Luis Eduardo Aute?
–Gran pregunta. La vida es todo, sin vida no hay nada. La vida es el todo, nada existe sin la vida, de modo que nada hay más que estar vivos”.
Sin embargo, aclara que depende de cómo se pasa uno la vida y cómo se la pasan otros viviendo lo esencial de la vida.
“No lo sé, pero por lo menos en mi caso esa pregunta está cada vez más viva ahora que tengo ya menos tiempo en mi existencia por este planeta. Sigo sin encontrar respuestas, únicamente sé que uno de los objetivos de la vida está en cuestionar qué es la vida y preguntarse de qué se trata para vivir más de acuerdo con lo que debería de ser su sentido.
Pensativo, asegura que a veces la vida tiene poco sentido.
“Pero creo que debe tenerlo, ¿no? Yo creo que una de las funciones del ser humano debe ser intentar desarrollar esa curiosidad del por qué está aquí, cuál es su función. Porque aquí llega uno sin haberlo pedido. Hay que sobrevivir, uno tiene que pasar por una serie de secuencias de todo tipo con alegría, dolor, miedo, rabia, contradicciones, etcétera. Y procrear, además, para que la especie no desaparezca. Ya luego uno se va de aquí y tampoco sabe a dónde.
Son muchas preguntas, dice el intérprete de “Sin tu latido” y se enfoca en el ser humano.
“Todo esto está dispuesto para que el ser humano exista y sea capaz de contemplar el universo para decir: ‘Bueno, ¡esto existe!’. El universo lo crea cada ser humano que nace. La importancia radica en saber el para qué de esa creación”.
–Parafraseando “Rosas en el mar”, su gran canción de 1967 con la que la catalana Massiel lo dio a conocer en México, quizá sea “más fácil encontrar rosas en el mar”.
–Mucho más fácil, porque la vida es un océano que está lleno de espinas. Estamos rodeados de mares de espinas cada vez más agudas.
Voy buscando libertad y no quieren oír.
Es una necesidad para poder vivir.
La libertad, la libertad, derecho de la humanidad.
Es más fácil encontrar rosas en el mar…
Al otro lado del espejo
Para Luis Eduardo Aute la poesía es la dimensión del ser humano que más se puede aproximar al sentido de la vida que comento.
“La poesía es buscar la realidad verdadera de la realidad, de lo que llamamos realidad que para mí es absolutamente irreal. Para mí la realidad está en los sueños, en la búsqueda de lo que hay al otro lado del espejo”.
Según su propia definición, “la poesía es la dimensión mágica del ser humano. Es la dimensión que trasciende la fea realidad de todos los días, lo que más se puede parecer a una dialéctica filosófica de la vida y a veces, puede llegar mucho más allá de la propia filosofía”.
–Pareciera que está leyendo de vuelta a Lewis Carroll, por aquello de “al otro lado del espejo”.
–Lewis Carroll es eterno…
“Pero no estoy leyendo nada ahora, por falta de tiempo. Suelo leer poesía, porque soy mal lector de narrativa. Sucede que me detengo en una palabra cuando leo prosa como si padeciera una patología cada vez más enfermiza. Me gusta descubrir qué significan las palabras independientemente de su contexto, buscar sus raíces etimológicas y trascender la apariencia. Sigo una palabra a lo largo del día y resulta que muchas veces su significado es lo contrario de lo que quieren decir. De ahí que me gusta jugar con las palabras y revelar sus significados al otro lado del espejo”.
El centro cultural Roberto Cantoral espera el concierto de Aute el próximo viernes 7 de noviembre como una “Noche íntima de poesía”, con la presentación de su reciente poemario “Claroscuros y otros pentimentos”.
–¿Qué papel juega la pintura en su vida?
–Es parte esencial, porque desde que era niño jamás he dejado de pintar. Y no tendría sentido la vida si no tengo la posibilidad de encerrarme en mi taller y ponerme a fabricar imágenes. “No soy capaz de imaginar mi vida sin fabricar imágenes”, reitera.
Filipinas, México, Cataluña
Músico, cantautor, director de cine, actor, escultor, escritor, pintor y poeta español, Luis Eduardo Aute habla de Filipinas, país donde nació el 13 de septiembre de 1943.
“Es como un planeta extraño del que caí porque allí nací y porque allí viví hasta los 11 años de edad, cuando mi familia regresó a España y ya luego jamás volví a ese planeta raro. Nunca, ni a dar conciertos”.
Cuenta que en su historial de arte hubo dos momentos en los que estuvo a punto de regresar, pero fueron fallidos. “Tengo la sensación de que las Filipinas son como un planeta distante con recuerdos diversos, algunos más entrañables, otros feos; pero de preferencia, es eso: Otro planeta”.
Pero al hablar de México, le cambia el tono; “Es un planeta muy cercano. Vengo con bastante frecuencia aquí, disfruto mucho de mis estancias. Es un país que me fascina”.
Aute anuncia lo que verá el público capitalino el próximo viernes en el centro cultural Roberto Cantoral de la Sociedad de Autores y Compositores de la Música Mexicana (SACM), a las 20:30 horas:
“Cantaré mis canciones del disco ‘El niño que miraba al mar’ con otras anteriores y la proyección de un cortometraje previo al concierto, de una película en DVD que se llama ‘El niño y el basilisco’”. Explica que es una película dibujada por él mismo, es una cinta de animación “muy primitiva, muy artesanal” del mismo disco que presentó hace un año en el Teatro Metropolitan de la Ciudad de México.
“Yo quería presentar otro cortometraje que tengo, también de dibujos animados, pero se me olvidó anunciar que sólo era para adultos y no lo vamos a proyectar ahora. No que fuera una película porno ni nada por el estilo, pero sí contiene escenas muy fuertes y no me voy a meter en problemas de herir ciertas sensibilidades porque no anuncié que no era para niños”.
–¿Quién es Luis Eduardo Aute?
–Me alegra que me haga esa pregunta, porque es en lo que ando a lo largo de toda mi vida, intentando descifrar ese enigma.
“¿De qué se trata eso de que yo esté aquí, por qué y para qué? Son las preguntas que más me hago en toda mi vida. Supongo que en algún momento, en el más allá o en el menos allá, hallaré la respuesta porque hasta este momento no la he podido descubrir”.
De la independencia catalana
A cuatro días de que se realice una consulta no oficial entre los catalanes sobre la iniciativa de independencia de España, Luis Eduardo Aute comenta:
–Es una situación muy conflictiva la que tenemos allá, es un problema que viene de muy largo tiempo y ahora tendrá que resolverse.
“Estoy de acuerdo en que se haga una consulta para que los catalanes decidan qué es lo que desean hacer. Personalmente, no quisiera que se fueran de España. Mi padre era catalán, tengo familia catalana y Cataluña es parte de mi cultura. Si se separa sería como si me cortaran un brazo. Pero lo más lógico y coherente es que se les pregunte en una consulta pública a los catalanes qué quieren hacer, están en su derecho de elegir si permanecen o se separan de España. Aunque la constitución no se los permita, deben ser consultados para resolver la cuestión y no hacer un problema aún mayor de lo que es.”
–¿Sigue en contacto con los afamados cantautores de lengua catalana Raimón y Luis Llac?
–Nunca nos vimos demasiado.
“Tuve más relación con Serrat, pero en los últimos años ya cada vez menos, pero es culpa mía. Yo cada vez me encierro más en mi casa y veo menos gente. Entre otras cosas, porque siento que día a día me queda menos tiempo en este globo redondito, valga la reiteración.
“Dejémoslo en globo. Si bien me resulta como un globo medio cubista. Es ahí mi planeta donde quiero aprovechar todo mi tiempo y hacer aquí los mundos que he dejado pendientes, los quiero terminar y por ello es que me he encerrado tanto. Veo menos a los amigos y tengo menor contacto con la gente”.
–Pero no le sucede así con el amor ni con la novia, ¿verdad?
–¡Sí, sí, continúo adorando una novia ahora, porque ella es mi mujer y la madre de mis hijos. Yo la traiciono con una perra preciosa que tengo!
“Es mi otra novia esta perra preciosa, pero mi mujer me permite este enamoramiento porque ella también está enamorada de mi perra. Es uno de los grandes amores en mi vida por este planeta y de ahí que otra de mis preguntas sea por qué le decimos ‘planeta’ a esta Tierra donde vivimos y no redondeta”.
–¿Redondeta? La neta sí sería buen título para el próximo disco de Luis Eduardo Aute. La Tierra redondeta o…
–La neta redondeta. Sí, seguramente.