MÉXICO, D.F. (apro).- El seleccionador de México, Miguel El Piojo Herrera aceptó su responsabilidad en el tropiezo ante Bielorrusia (2-3), al reconocer que los cambios en la segunda parte desordenaron al equipo. Sin embargo, Herrera también repartió culpas de la derrota: “Nada tiene que ver el frío con un equipo que se para y se distrae, que no tiene concentración en la parte defensiva porque los muchachos de arriba hicieron su trabajo; se pusieron arriba en el marcador dos veces”, justificó. El entrenador también admitió que “en un partido con tantos errores, con tantas desconcentraciones, con tanta displicencia es imposible pedir que ganes”. Además, Herrera reconoció que “hoy menospreciamos a un rival que no tienes que menospreciar, y ahí está la muestra: en el futbol actual te confías, crees que eres mejor y terminas perdiendo”. Luego insistió en que todos deberían centrarse en la autocrítica de las desatenciones y que a lo mejor tantos movimientos realizados en el segundo tiempo desordenaron al equipo en esa búsqueda por no perder. Miguel Herrera también recriminó a los defensas por sus desatenciones, en particular en las acciones del primer gol en contra, cuando los jugadores mexicanos se quedaron parados luego del rechace del penalti de Alfredo Talavera y que permitió el remate de un contrario para el tanto de la igualada. Al entrenador tampoco le pareció que la selección nacional haya recibido otra anotación luego de un saque de manos. “El equipo estuvo distraído. Al final acabamos con mucha gente arriba para intentar rescatar algo que sinceramente no merecíamos, incluso nos pudieron hacer un gol más”, admitió. En cambio, rescató la actuación del delantero Raúl Jiménez, autor de los dos goles de México, pero que no tiene participación en su actual club, Atlético de Madrid. Según El Piojo Herrera, Jiménez “está para luchar por un puesto (titular) en su equipo”. Además se refirió a la inactividad del portero Guillermo Ochoa en el Málaga: “No juega por un capricho de su técnico”, sentenció. Y el mediocampista Andrés Guardado no se guardó nada a la hora de exponer los motivos de este nuevo tropiezo de la Selección: “No podemos ser tan displicentes. No podemos jugar de esa manera. Así no se defiende una camiseta de la selección mexicana”, fustigó.