MEXICO, D.F. (apro).- La Secretaría de Comunicaciones y Transportes (SCT) postergó la publicación de las bases definitivas de la licitación del tren rápido México-Querétaro, cuya anterior licitación se canceló el 6 de noviembre, y las prebases apenas se dieron a conocer el miércoles 14, con un plazo de 15 días naturales para que los interesados dieran a conocer sus puntos de vista. De acuerdo con el comunicado de la SCT, esta postergación es resultado de los comentarios y recomendaciones de “ocho empresas e instituciones”, además de los puntos de vista de 14 empresas interesadas en la licitación, cuyos representantes acudieron a una reunión convocada por Pablo Suárez Coello, titular de la Dirección General de Transporte Ferroviario y Multimodal (DGTFM). La SCT afirma que la DGTFM requerirá “de un plazo mayor para analizar pormenorizadamente dichas aportaciones, a fin de evaluar su inclusión en las bases, junto con las 21 de las 23 recomendaciones emitidas por la Comisión Federal de Competencia Económica (CFCE)”. El boletín no fija un plazo para dar a conocer las bases de licitación. A partir de su publicación, correrán 180 días naturales (seis meses) para que se de a conocer el nombre de las empresas interesadas en participar en la licitación. La dependencia argumentó que “es interés primordial de la SCT conocer y considerar las opiniones que puedan contribuir a dar mayor claridad, certeza y transparencia al proceso licitatorio”. Una de las novedades de este nuevo proceso es la participación de la Organización para la Cooperación y Desarrollo Económicos (OCDE) como presunto testigo de calidad en la licitación. Hasta ahora se tenía información de 14 empresas interesadas, incluyendo a las dos trasnacionales chinas que originalmente concursaron y ganaron en noviembre de 2014. Este fallo se canceló, en medio del escándalo de la “Casa Blanca”, cuyo propietario original se supo después era Juan Armando Hinojosa, propietario de Grupo Higa, uno de los consorcios mexicanos que ganó la anterior licitación.