OAXACA, Oax. (apro).- El reconocido artista plástico Sergio Hernández se sumó a la lucha que libra el pintor Francisco Toledo para frenar la obra del Centro de Convenciones en el Cerro del Fortín. Incluso, calificó al gobernador Gabino Cué de ser un gobernante “insensible” e “ignorante”. “Yo creí en él. Yo lo apoyé y ahora estoy decepcionado, sobre todo porque no pensé que fuera tan insensible y tan ignorante”, apuntó. El pintor mixteco, quien recientemente inauguró en el Museo Nacional de Bellas Artes de Cuba su exposición “Los ardientes”, con 22 piezas de óleos y grabados –que se exhibirá hasta el próximo 6 de septiembre–, consideró que el negocio del Centro Cultural y de Convenciones está salpicado de una “corrupción galopante”. “Lo que yo visualizo es que se violenta la ciudad, se violenta arquitectónica y visualmente, pero, sobre todo, un patrimonio, un centro histórico lo están dividiendo en clases muy marcadas, entre pobres y ricos, los de coche y los de a pie”. De acuerdo con Hernández, el gobierno encargó un proyecto a un despacho muy prestigiado, y una vez que le hicieron el trabajo “se toma la idea y se pone donde ellos creen que hay más negocio. Ese es un negocio, lo que hay detrás es un negocio y están coludidos empresarios, por eso no se entiende que lo vayan a apoyar mototaxistas y camioneros. Es una familia la que se va a repartir el queso”, subrayó. Entonces, lo que están haciendo, dijo, “es dividir a la sociedad en clases sociales, porque el estacionamiento está hecho para el hotel (Victoria) y la Guelaguetza, y tratan de llegar ahí para evitar tener contacto (con la gente de a pie) y con la fiesta que históricamente es del pueblo”. Añadió: “La cultura también se ve violentada por estos eventos, y sobre todo está detrás la construcción porque no están haciendo un proyecto arquitectónico”. La arquitectura hoy en día, explicó, se entiende como un festejo, por los seres humanos que participan, y lo que están haciendo es bloques de concreto y lo cubren con pasto para que se vea verde. “Quieren meter un puente sobre una avenida muy importante, y lo que veo es que afea, es corriente y un reflejo de una corrupción galopante”. Pero lo más lamentable, apuntó, es que proviene de un gobierno que se dijo ciudadano, lo que demuestra que ni la coalición funcionó, ni el PRI, ni el PAN, ni el PRD funcionan, “son la misma gata, pero revolcada”. Ahora lo que viene son las candidaturas independientes o ciudadanas y entonces sí habrá sorpresas, advirtió el pintor. Recordó que después de lo que pasó en 2006, con un gobierno que violentó el estado para este pueblo, “lo que no entiendo es qué pasó con Gabino, si él es juarista, no sé dónde quedó, no se parece en nada”. Y cuestionó que se destinen más de 600 millones de pesos a un proyecto cuando en Oaxaca hay situaciones apremiantes. “Lo importante es que no podemos hacer en una ciudad o estado un proyecto de un costo tal cuando hay necesidades apremiantes, cuando las mujeres dan luz en las calles o afuera de un hospital porque no hay médicos, ni los servicios, que viajan dos o tres días en transporte y llegan y no hay medicina, entonces, la gente muere por problemas de salud”. Pero lo más triste, abundó, es que la sociedad se presta a ser acarreada y engañada, pero eso es falta de educación, entonces, también hay que invertir en educación y cultura. “Hay que terminar con la corrupción, porque no es correcto que un secretario de Salud (Germán Tenorio Vasconcelos) tenga un avión privado, añadió. Y reconoció que para las próximas elecciones los ciudadanos “la tenemos difícil”. Remató: “Yo ya no creo en ellos (los candidatos y los partidos). Lo más importante es hacer un trabajo social con la sociedad y no acercarse a este grupo porque son una bola de mentirosos”.