MÉXICO, D.F., (apro).- El titular de la Secretaría de Desarrollo Social (Sedesol) José Antonio Meade Kuribreña, afirmó que ninguno de los 13 programas de combate a la pobreza a cargo de la dependencia será eliminado o sufrirá compactación a pesar de la reducción del presupuesto para el próximo año. La Sedesol, dijo, aprovechará los espacios de coordinación con otras dependencias en el marco de la Cruzada Contra el Hambre, para reducir las carencias de la población más vulnerable, como los jornaleros agrícolas. En rueda de prensa, el funcionario recordó que en la propuesta enviada a la Cámara de Diputados la Sedesol solicitó un presupuesto similar al de 2015, que fue de 114 mil 500 millones de pesos. El de 2016 será de 109 mil 271 millones. La reducción de cinco mil millones de pesos a los recursos para 2016, explicó, obedece a una reasignación en el Ramo 20 que va de la Sedesol a la Secretaría de Desarrollo Agrario, Territorial y Urbano (Sedatu) como parte del Programa para el Desarrollo de Zonas Prioritarias (PDZP) y que incluye infraestructura básica comunitaria y servicios básicos para viviendas. Meade refirió que los 13 programas que maneja la Sedesol con sus respectivos padrones de beneficiarios, continuarán operando en 2016, incluida la Cruzada Nacional contra el Hambre, que abarca mil 12 municipios del país e involucra a 19 dependencias y 30 programas sociales del Gobierno Federal. Dichos programas, dijo, operan de manera coordinada para reducir diversas carencias específicas de la población en pobreza extrema, y la idea es que este esquema se establezca en otra población vulnerable, como los jornaleros agrícolas. “La cruzada contra el hambre se concentra contra la pobreza extrema tomando en cuenta que quienes tienen más de tres carencias no tendrán capacidad de generar los ingresos necesarios para superar las líneas de bienestar”, explicó. Actualmente, añadió, hay unos dos millones de jornaleros agrícolas, y si se cuenta a sus familias la cifra se eleva a aproximadamente nueve millones de personas con diversas carencias básicas. La Sedesol, comentó Meade, trabaja en identificar a esas poblaciones para llevarles los beneficios de los otros programas, y añadió que la dependencia cuenta actualmente con un plan de apoyo a jornaleros agrícolas y becas para sus hijos. “No solo habremos de expandir la Cruzada en el territorio, sino que habremos de aprovechar el espacio de coordinación que ofrece para que todas aquellas dependencias que manejen padrones e identifiquen carencias puedan hacerle llegar a esas personas los beneficios de la Cruzada”, puntualizó. Cuestionado sobre la meta establecida por la Organización de las Naciones Unidas (ONU) para erradicar la pobreza extrema en población que vive por debajo de un dólar con 90 centavos (unos 32 pesos), Meade reconoció que en México hay alrededor de siete millones de personas en esa condición que están incluidos en los 11.4 millones de mexicanos que viven en pobreza extrema. “En México está realidad se aplica en aproximadamente 5.9% de la población, es decir, siete millones de personas”, reconoció y aseguró que el país está en posibilidad de alcanzar la meta de la ONU. “La línea de bienestar mínimo en México es superior a este dólar 90, entonces estos siete millones estarían incluidos en los 11.4 millones que en México se encuentran en pobreza extrema conforme a nuestra propia definición y por lo tanto son objeto de la Cruzada Nacional contra el Hambre”, afirmó. Sin embargo, señaló que la ONU y México miden la pobreza en forma distinta. La forma de medir la pobreza en México es la del Consejo Nacional de Evaluación de la Política de Desarrollo Social y consideró que es la adecuada. “Consideramos que es la metodología y el enfoque adecuado, y el que en otras partes del mundo se mida con una métrica distinta no debe desviar nuestra atención de la medición nacional acordada y adecuada para nuestro trabajo”, aclaró.