MÉXICO, DF (apro).- Se despide este viernes 6 de nuestro país el multi-instrumentista Pedro Aznar, uno de los pilares del rock argentino, con un repertorio de piezas clásicas de su prolija autoría y adelantos de su próxima grabación discográfica, en el Lunario del Auditorio Nacional, a las 21 horas. “Lo que más me gusta en este momento de mi vida y de mi carrera es que los sueños de ser músico que tuve desde niño se han ido cumpliendo y consolidando; yo creo que esto es lo mejor que le puede pasar a alguien”, declaró Aznar: “Las cosas que soñamos marcan el camino y dictan el rumbo de nuestro existir. Yo me siento muy feliz que esos sueños infantiles de tocar, hacer música, emocionarme y emocionar a los demás sean para mí como una bendición muy grande.” Con más de una veintena de discos, a sus 56 años de edad Pedro Aznar prosigue fiel a aquella ensoñación artística que lo hizo navegar y volar por distintas partes del mundo, llevando como bandera el lenguaje universal y pacífico de la música. --¿Cuándo quiso tomar la música cual forma de vida y manera espiritual de ser? --Yo siento que la música me tomó a mí. Realmente no tuve mucha opción, fue una pasión tan arrolladora que me llevó con ella sutilmente, me arrastró y yo me dejé llevar a donde quiso, me entregué a ella porque mi instinto me decía que era lo mejor que podía hacer. Director musical, arreglista y escritor nacido el 23 de julio de 1959 en Buenos Aires, Aznar ha musicalizado películas como El Hombre mirando al sudeste, No mires para abajo, Últimas imágenes del naufragio y No te mueras sin decirme a dónde vas, del cineasta argentino Eliseo Subiela (1944). Para su adiós en el Lunario de la Ciudad de México, Aznar interpretará piezas de su reciente disco Mil noches y un instante, y además promete “revisar muchas canciones que hace mucho tiempo no llevo al escenario”. Su octavo álbum Quebrado (2008) posee una frase fundamental que rodea el entero de su obra: “Miedo de morir antes de saber vivir”. --¿Desde qué parte de la profundidad musical nace este motivo que convierte al disco Quebrado en uno de los más importantes en su historial? --Este disco va más allá de lo musical. Es más por el sentido de la vida, la realización personal, la búsqueda por expresar cabalmente quién es uno; va más allá de lo angustiante de esa frase, es una pregunta francamente incontestable, pues es para hacerse siempre y nunca tiene respuesta… “Aquel disco lo escribí literalmente quebrado por una serie de pérdidas personales, entre las cuales se encuentra el fallecimiento de mi madre que fue un golpe tremendo para mí y que me puso frente a mi propia finitud como ninguna otra cosa lo ha hecho antes. Ese fue un momento en que la frase y pregunta se hicieron verdaderamente angustiantes. “Sin embargo, la única respuesta es el miedo a no expresar la vida en su máxima potencia. La idea fundamental es hacernos eternos en hondura, no en el tiempo porque esto es imposible, para que nuestra raíz llegue a lo más profundo de nosotros.” México y Argentina Cofundador en 1978 junto a Charly García de la banda Serú Girán; estudioso de sonidos que van de Los Beatles al jazz y el folclor argentino, la búsqueda sonora de Pedro Aznar lo condujo a colaborar con innumerables figuras musicales de su país como Gustavo Cerati de Soda Stereo, Luis Alberto Spinetta, Nito Mestre, Mercedes Sosa y León Gieco. Asimismo, ha grabado con Roger Waters, de Pink Floyd; el brasileño Iván Lins; la colombiana Shakira, o Calle 13, de Puerto Rico. En los ochentas realizó giras con el guitarrista norteamericano Pat Metheny, y en nuestro país ha trabajado con el desaparecido jazzista Eugenio Toussaint (1964-2011) o la cantautora oaxaqueña Lila Downs. Destaca su compromiso a través de la música para compartir y apoyar causas justas. Una de ellas fue su conmovedor gesto hace un año en el Teatro de la Ciudad Esperanza Iris, cuando cantó “Como la cigarra” de Maria Elena Walsh “para los 43 de Ayotzinapa”, seguido de una ovación y ritual de conteo hecho por el público al grito popular de “Justicia” retumbando el teatro: Tantas veces me mataron, tantas veces me morí; sin embargo estoy aquí, resucitando. Gracias doy a la desgracia y a la mano con puñal porque me mató tan mal y seguí cantando... (ver https://www.youtube.com/watch?v=N29bJI_29ak) --¿Cómo comenzó su relación con México? --La primera vez fue por 1996, cuando produje el disco Babel del grupo Santa Sabina. Estuve en México varias veces y luego pasé un tiempo sin volver... “De México siempre admiré su cultura, a la que he estado muy ligado desde chico. Admiro a México de muchas maneras y por muchas razones, allá tengo muchos poetas y músicos favoritos. México ha estado presente en mi vida, así como Argentina está presente en ustedes los mexicanos a través de su cultura. “Yo recuerdo haber escuchado a Jorge Negrete y a Miguel Aceves Mejía de niño, esa música ha estado en mi corazón. Es una relación íntima con México que se renueva a cada visita, como refrendar un viejo amor que me viene desde siempre.” --¿Siente similitudes sociales entre México y Argentina? --Bueno, yo creo que nuestros países aún se están pariendo a sí mismos y tanto en México como Argentina hemos sido reiteradamente golpeados desde afuera y de adentro. Nos hemos maltratado entre nosotros mismos y nos han maltratado mucho de afuera, nuestras democracias aún son incipientes y en algunos sentidos todavía tambaleantes. “La democracia como concepción finalmente se arraiga en nosotros como ciudadanos, va más allá de los juegos políticos, y recae más el compromiso de nosotros como pueblos”, agrega a manera de invitación a la periodista para tornar a temáticas musicales. Los Beatles, sus favoritos Aznar comenzó tocando guitarra y luego tomó el bajo, un instrumento con el que es usual escucharlo. --¿Cuál de todos los instrumentos que toca es su corazón? --Esto es algo difícil de pensar porque los instrumentos son como los idiomas, cada uno tiene una manera de expresar un pensamiento distinto, cada cual tiene un lenguaje propio… “Yo siempre he dicho que el bajo es mi casa, siento que en ese lugar está mi territorio y aunque tengo una relación muy cercana con el piano, no podría quedarme sólo con un instrumento. Quizá todos hablan de lo que dicta mi corazón.” --¿Cuál es su grupo favorito de todos los tiempos? --Creo que tendría que decir que Los Beatles, indudablemente, por una cuestión de historia y de recuerdo emocional, quizá porque es la primera música que recuerdo y el motivo por el cual ahora soy músico. “Además, por el valor intrínseco, es un grupo fundamental porque hay un antes y un después de su música, son fundadores de estilos. Los Beatles iniciaron tendencias y se puede decir que eso muy pocos grupos en el mundo lo han logrado.” --¿Paul McCartney o John Lennon? --Nuevamente no me podría quedar sólo con uno, yo creo que su trabajo juntos es insuperable. Como autores y como dos líderes, su obra está a la altura de distintas coloraciones, como también fue el caso de Jagger y Richards, de Los Rolling Stones. Son gente cuya obra se potencia tanto que la dupla va más allá de lo que cada uno de ellos es. Parece decidirse: “Tal vez como melodista brillante, extraordinario cantante, excelente instrumentista y compositor notable, Paul. Pero John va más allá del plano musical, es un referente de la lucha por la paz, un hombre que se adelantó a su tiempo, un avatar como Bob Marley. Son músicos que dejan una impronta que atraviesa las generaciones, su mirada trasciende lo estrictamente musical”. (Con información de Iris Bringas)