Cambio climático: Los peligros de 2016
Londres (apro).- Tormentas severas, sequías extremas, deslaves e inundaciones catastróficas afectarán con más frecuencia nuestro planeta, de acuerdo con un reporte científico del influyente Servicio Meteorológico británico (Met Office), que concluyó que el 2016 será el año más caluroso de la historia.
El grupo con sede en Londres destacó que el creciente cambio climático y el impacto por el fenómeno El Niño aumentarán las temperaturas globales para el próximo año a niveles récord, superando incluso las marcas históricas registradas en 2014 y 2015, que ya habían preocupado en gran medida a los científicos y autoridades mundiales.
El informe del Met Office se dio a conocer pocos días después que 195 países acordaron un plan histórico para combatir el calentamiento global tras una cumbre mundial en París.
Los gobernantes y delegados mundiales acordaron limitar el aumento de las temperaturas globales hasta en 1.5 grados centígrados en comparación con la era pre-industrial.
El acuerdo incluyó limitar la cantidad de gases de efecto invernadero emitidos por la actividad humana al mismo nivel en que los árboles, suelo y océanos pueden absorberlos de forma natural, así como revisar cada cinco años la contribución de cada país para reducir las emisiones de manera que puedan ir incrementando esta reducción.
Sin embargo, los pronósticos del Met Office indican que las temperaturas promedio globales en 2016 aumentarán 1.14 grados centígrados por sobre los niveles pre-industriales, demostrando cuán difícil será alcanzar la meta de 1.5 grados.
La entidad también afirmó que existe 95% de posibilidades de que el aumento de las temperaturas globales sea de entre 1.02 y 1.26 grados en este año, y sólo un 5% de posibilidades de que las temperaturas promedio para el próximo año terminen por debajo de aquellas registradas en 2015.
“La mayor parte del calentamiento se debe al cambio climático, pero a ello debemos sumarle el evento de El Niño”, afirmó el profesor Adam Scaife, jefe de la unidad de pronósticos meteorológicos mensuales y anuales del Met Office.
El Niño es un fenómeno climático relacionado con el calentamiento del Pacífico oriental ecuatorial, el cual se manifiesta erráticamente cíclico. Este fenómeno, en sus manifestaciones más intensas, provoca estragos en la zona intertropical y ecuatorial, debido a las intensas lluvias, afectando principalmente a la región costera del Pacífico de América del Sur.
El actual fenómeno es el mayor desde 1998 y está registrando su nivel máximo en estos días. De todos modos, los efectos a la temperatura global tardan tiempo en propagarse al resto del planeta.
“Esperamos ver para 2016 el calentamiento máximo como consecuencia de El Niño”, agregó Scaife.
Un aumento de las temperaturas debido al calentamiento global, combinado con variables naturales, lleva a mayores posibilidades de que se produzcan eventos meteorológicos extremos.
“Cuando la variabilidad se suma a un calentamiento creciente, ello puede tener impactos nunca antes vistos”, continuó el experto.
En los últimos dos años, sequías intensas y olas de calor han afectado a países como China, Rusia, Australia, Medio Oriente y partes de Sudamérica.
Las inundaciones recientes en el noroeste de Inglaterra, que dejaron a cientos de familias sin electricidad y con sus viviendas bajo el agua, habrían ocurrido por el cambio climático.
A pesar de que cada vez más gases de invernadero, como el dióxido de carbono (Co2) están atrapando más calor en la Tierra, la última década registró un relativamente lento aumento de las temperaturas del aire, también considerado como “una pausa” por algunos científicos.
Pero de acuerdo al Met Office, el calentamiento global no se ha detenido en absoluto, ya que ciclos naturales climáticos han provocado que más calor quede atrapado en los océanos.
La entidad británica concluyó que todas las señales indican que el periodo de aumentos lentos en la temperatura del aire se ha terminado, y que el nivel del calentamiento global se acelerará rápidamente en los próximos años.
El año 2014 fue el primero que superó la marca del grado centígrado por sobre los niveles pre-industriales. Las tendencias de temperaturas altas causadas por el cambio climático continuarán al menos que las emisiones de Co2 comiencen a descender.
La situación actual demuestra cómo el calentamiento global, combinado con fluctuaciones naturales menores, está empujando las temperaturas a niveles sin precedente en las mediciones históricas.
“Esta es otra evidencia más acerca de que el mundo se está calentando rápidamente. Veremos más tormentas severas e inundaciones en sitios como Cumbria (norte de Inglaterra) y Chennai (India) si los gobiernos no actúan rápido para reducir la contaminación provocada por el carbono”, explicó Simon Bullock, vocero del grupo ambientalista Amigos de la Tierra.
“El acuerdo de París fue clarísimo acerca de que se necesitan medidas urgentes. Sin embargo, el gobierno británico de David Cameron ha reaccionado a ello reduciendo los incentivos para el sector de los paneles solares, al tiempo que apoya la facturación hidráulica (fracking). Esta respuesta inmoral es exactamente lo opuesto a lo que necesitamos”, advirtió.
Bob Ward, director de políticas del Instituto de Investigaciones de Grantham sobre Cambio Climático del London School of Economics, afirmó que a nivel global las temperaturas de la superficie terrestre “siguen en aumento”.
“Esto significa que los gobiernos deben actuar con firmeza y de forma urgente para recortar las emisiones de gases de invernadero, si se busca mantener por debajo de los 2 grados centígrados el máximo de aumento de las temperaturas globales, como se acordó en París”, sostuvo el experto.
“Este nuevo pronóstico del Met Office es otro golpe letal para aquellos ‘escépticos’ del cambio climático que creen que el calentamiento del planeta se ha detenido o registró una pausa”, concluyó.
Según la Oficina de las Naciones Unidas para la Reducción del Riesgo de Desastres (UNISDR), en las últimas dos décadas se han registrado los años más calurosos desde que se empezó a tomar nota de la temperatura, y el hielo en el Océano Ártico ha disminuido a un ritmo de 2.7% por decenio.
Los datos de la ONU indican además que desastres naturales como las inundaciones, tormentas, olas de calor y otros han costado la vida a 600 mil personas desde 1995.Ese grupo señaló que todos estos fenómenos naturales afectaron a más de 4 mil millones de personas.
En los últimos cuatro años se han contabilizado unos 3 mil 400 fenómenos de esas características, 14% más que en los diez años anteriores y casi el doble que en el período comprendido entre los años 1985 y 1995.
"El mundo está pagando un alto precio", dijo la directora de UNISDR, Margareta Wahlstrom, en referencia al calentamiento del planeta.
Además, sostuvo que no se ha recopilado bien el daño económico que producen esas catástrofes. La oficina de la ONU estima que los terremotos y los tsunamis causan daños anuales entre 250 mil y 300 mil millones de dólares como consecuencia de la devastación a las industrias, el comercio y las vidas de las personas. El fenómeno más recurrente es el de las inundaciones provocadas por fuertes precipitaciones.
La UNISDR considera que las catástrofes naturales que más vidas cuestan son las tormentas. Desde 1995, más de 242 mil personas han muerto debido a los fuertes vientos, y aquellos países más afectados por catástrofes naturales fueron Estados Unidos (472), China (441), India (288), Filipinas (274) e Indonesia (163).
Para el director del grupo ambientalista Greenpeace, Jean-François Julliard, sigue siendo muy preocupante la falta de acción a la hora de prevenir el aumento de las temperaturas globales, expresando mucho escepticismo por el acuerdo firmado en París.
Para Julliard, dicha cumbre mundial dio como resultado "una de cal y otra de arena".
"Es un buen punto de partida. Podría haber sido un desastre y que no se hubiera producido un acuerdo. Sin embargo, el contenido es insuficiente porque no aclara el objetivo a largo plazo ni tampoco los medios que se utilizarán para rebajar las emisiones (de gases de efecto invernadero) por debajo de los 2 grados e incluso alcanzar el máximo de 1.5 grados", consideró el directivo.
"No hemos resuelto el problema del cambio climático ni vamos a salvar al planeta del cambio climático, eso está claro”, concluyó.