CUERNAVACA, Mor. (apro).- La “guerra de lodo” entre el gobernador Graco Ramírez y el senador Fidel Demédicis Hidalgo arreció poniendo en crisis interna al PRD, en el que ambos militan. Lo que empezó como una batalla política en torno al control de los diputados en el Congreso local y de los municipios, se transformó en una confrontación de dimes y diretes y avanza hacia la judicialización y la expulsión del partido de alguno de los contrincantes. Y es que la historia de pugna entre Graco Ramírez y Fidel Demédicis es de años. Actualmente, el mandatario domina el Consejo Político y la propia dirigencia, con la presencia de su hijastro y encargado de los negocios familiares, Rodrigo Gayosso Cepeda, además de la coordinación del grupo parlamentario y la Junta Política y de Gobierno, con la diputada Hortencia Figueroa Peralta, quien al inicio de su carrera fue apoyada por Demédicis Hidalgo, pero ahora le ha refrendado la lealtad al gobernador morelense. En tanto, Fidel Demédicis hizo ganar a su candidato en Tlaquiltenango, Enrique Alonso Plascencia, personaje que compitió y perdió por el cargo de alcalde en 2012, lo intentó de nuevo en 2015 y al fin consiguió el triunfo. Hoy ganó notoriedad porque se opuso terminantemente al Mando Único e, incluso acompañado de la población tlahuica, expulsó a los jefes policiacos del municipio. Pero cobró mayor notoriedad por todas las filtraciones del gobierno del estado a ciertos medios acusándolo de que era “pollero”, es decir, traficante de personas, y que “su esposa” o “exesposa” está presa acusada de secuestro. Ayer El Universal publicó antes del mediodía que el edil perredista había sido detenido por portación de arma prohibida, lo que fue desmentido y aclarado por el propio alcalde, quien publicó fotos en Facebook haciendo trámites en el Sistema de Administración Tributaria en Cuernavaca. Lo cierto, destacó el presidente municipal, es que el miércoles por la tarde, cuando se trasladaba a la Ciudad de México, en la caseta de Tlalpan elementos de la Policía Federal detuvieron su vehículo y revisaron a sus escoltas, dos exmilitares que acreditaron el registro de las armas, y luego continuaron su camino. El otro municipio que Fidel aspiraba a controlar es Temixco, lugar del que es oriundo. El alcalde saliente, Miguel Ángel Colín Nava, es gente suya, pero debido a su desastroso gobierno, era imposible que el senador refrendara el triunfo en la localidad. De hecho, de acuerdo con funcionarios del actual gobierno municipal, en Temixco hay un desvío de más de 60 millones de pesos, algunos de los cuales son recursos federales. Por ello hizo la guerra a Graco en la precampaña. Al no tener posibilidades de ganar, Demédicis decidió pactar con Izquierda Democrática Nacional (IDN), que en Morelos dirige Anastasio Solís Lezo, y apoyó “con todo” a su candidata Gisela Mota Ocampo. Sin embargo, dada la “estructura” y capacidad de “movilización” que tiene Fidel en el municipio, impuso algunas condiciones. Primero, que su hija Gabriela Teyko Demédicis Hiromoto, fuera suplente de la alcaldesa. Sin embargo, la propia Gisela se opuso a esto. Luego, aceptó que Teyko ocupara la primera posición de la lista de candidatos a regidores, con lo cual aseguró la plaza; enseguida sugirió que fuera su concuña, esposa de un cuñado de su propia mujer, Irma Camacho García, quien ocupara la suplencia. A esto ya no pudo negarse Gisela, menos Tacho Solís Lezo. Enfrente tenía al candidato a alcalde de Temixco, David Martínez, amigo cercano de Graco Ramírez, quien padeció un secuestro que duró unas horas, con ciertas peculiaridades, como el hecho de que fuera liberado por la policía casi de inmediato y que se publicitara enormemente la acción. Todavía hay quien considera que se trató de un “autosecuestro” o un montaje al más puro estilo del exsecretario de Seguridad Pública federal, Genaro García Luna. En la elección interna, Graco perdió frente a Gisela y Demédicis. Luego Mota Ocampo ganó la elección constitucional. El pasado miércoles, como informó Apro, el Tribunal Electoral del Poder Judicial de la Federación (TEPJF) resolvió el último juicio de nulidad interpuesto por Juan Andrés Huicochea Santa-Olalla, quien fue el candidato del PRI a esa elección. Gisela Mota tomó posesión el viernes 1 y 15 horas después fue asesinada por un grupo de matones que se introdujo a su domicilio. Lo que vino entonces fue un conflicto entre IDN y Demédicis por el control de la alcaldía de Temixco. Así, IDN exige que sea alguien de su grupo político, particularmente Juanita Ocampo, madre de Gisela, quien ocupe la alcaldía; mientras que Fidel, evidentemente, quiere que su concuña asuma el poder en la localidad. Pleito en tribunales Esto derivó en un pleito ante los tribunales. Sin embargo, Graco Ramírez decidió subirse a ese conflicto y, en contraposición a lo que hizo en la elección interna, con tal de quitar el control de Temixco a su acérrimo enemigo se sumó a las aspiraciones de Juanita Ocampo. En ambos escenarios, Graco ha utilizado la información y los recursos a su alcance para poner contra las cuerdas a Demédicis. De hecho, este jueves afirmó que familiares y colaboradores de Gisela Mota Ocampo acusaron al senador de haber participado en el crimen, por lo que la Fiscalía General tiene que investigar los señalamientos y al legislador perredista. Por su lado, Fidel ha utilizado su cercanía con Miguel Barbosa, líder perredista en el Senado, para responderle a su correligionario y enemigo. El legislador federal, que tiene serias aspiraciones a suceder al tabasqueño en la gubernatura de Morelos, lo acusó de haber iniciado una “campaña de odio” en su contra porque está molesto, ya que se ha convertido en un crítico de la administración estatal, particularmente por la falta de resultados en materia de seguridad pública y por los actos de corrupción denunciados, como el desvío de un crédito por 2 mil 800 millones de pesos. Incluso, tras rechazar las acusaciones sobre el caso Gisela Mota, el senador perredista reiteró que se ha puesto a disposición de la PGR para ser investigado. “Le pido a mi compañero de partido que haga lo mismo, vamos a ver si se pone a disposición de la PGR donde ya investigan el posible peculado del crédito y en materia de salud, que todo mundo conoce en Morelos”, advirtió en relación con las dos demandas interpuestas por la Coordinadora Morelense de Movimientos Ciudadanos. Esta semana, al interior del PRD, Rodrigo Gayosso Cepeda convocó a una sesión de Consejo Político a la que sólo fueron invitados los consejeros que simpatizan con Graco. Ahí, la orden del día fue exclusiva para golpear a Demédicis. Los puntos iban de apoyar con todo a Juanita Ocampo para que sea la próxima alcaldesa, hasta iniciar procedimientos y solicitudes para la expulsión del alcalde de Tlaquiltenango y del propio senador. A esto se suma el anuncio por parte del secretario de Gobierno, Matías Quiroz Medina, de que la Fiscalía estatal ha iniciado un procedimiento penal contra el alcalde Alonso Plascencia, pero además, la afirmación de Graco Ramírez hecha hoy en la Ciudad de México, de que también se investiga a Fidel Demédicis porque se benefició del asesinato de Gisela Mota. El mandatario ya había dejado entrever el señalamiento, unos días después del atentado, en entrevista con La Jornada, a la que declaró: “Se evalúan todas las líneas de investigación, no sólo el crimen organizado. También es claro que hay grupos políticos que se benefician por este asesinato”. Ahora señaló que “hay una declaración muy contundente de compañeros de Temixco y de la familia de Gisela. No es mi dicho, no es lo que yo afirmo, las personas más cercanas a Gisela hicieron una denuncia muy clara con nombres y apellidos de lo que ocurrió”. Graco Ramírez aseguró que Fidel Demédicis quiere justificar el asunto como un problema personal, y “yo no tengo problemas personales, cuando se gobierna no se tienen problemas personales, hay responsabilidades políticas”. “Ningún Abarca más” Mientras que sobre el caso Enrique Alonso, el gobernador Graco Ramírez informó que ha pedido se proceda en su contra porque tiene antecedentes de trata de personas y para poner en claro que en Morelos no hay complacencias como sucedió en Iguala, Guerrero, con José Luis Abarca Vázquez, acusado por la desaparición y muerte de estudiantes de la Normal de Ayotzinapa. El gobernador morelense agregó que es evidente que Enrique Alonso engañó al PRD-Morelos al ocultar que tenía antecedentes penales. Al participar este jueves en la plenaria del grupo parlamentario del PRD, el mandatario aseguró que en Morelos no se va a permitir “ningún Abarca más”, “en Morelos vamos aplicar la ley, y vamos aplicarla porque sabemos que la filtración del crimen organizado no reconoce siglas, se mete por donde quiere y como puede. No se permitirán delincuentes con camisetas del partido que sean”. Por su parte, el senador Fidel Demédicis afirmó que existe una “campaña de odio” en su contra orquestada por el gobernador Graco Ramírez, de ahí que se le acuse de haber ordenado la muerte de Gisela Mota y ahora se le pretenda expulsar del PRD. Indicó que la embestida obedece a su decisión de no solapar la problemática de violencia e inseguridad que se vive en Morelos, así como la corrupción en el manejo de los recursos públicos por parte del mandatario. El legislador comentó que el 28 de marzo de 2014 fue la última vez que habló con el gobernador y, ante la actitud que mostró, le dejó en claro que no le iba a solapar nada, por lo que se ha mantenido como un crítico de la actual administración. También dijo que la confrontación se acrecentó tras la muerte de Gisela Mota y la negativa de permitir que asuma el cargo, en su calidad de presidenta suplente, Irma Camacho García. Por último, apuntó que el Tribunal Estatal Electoral ya ordenó que se le tome protesta a la alcaldesa suplente.