CIUDAD DE MÉXICO (apro).- La Procuraduría Federal de Protección al Ambiente (PROFEPA) presentó una denuncia penal ante el Ministerio Público Federal (MPF) con sede en Mérida, Yucatán contra la persona que intentó exportar de manera ilegal 294 piezas de madera, desde Puerto Progreso con destino a Japón, sin contar con la documentación y los sistemas de control establecidos que acreditaran la legal procedencia del producto forestal. Así lo informó la delegación de la Profepa en Yucatán en un comunicado en el cual recordó que recientemente instauró un procedimiento administrativo en contra del responsable de transportar, en tres contenedores, 53 metros cúbicos de madera motoaserrada. “En una primera instancia el inspeccionado no acreditó la legal procedencia de la madera; posteriormente, durante el procedimiento simuló que se trataba de la especie corazón azul (Swartzia cubensis), cuando los inspectores federales de esta dependencia constataron que era madera de la especie Dalbergia sp”, indica. Por tal motivo, dice, esta autoridad solicitó apoyo interinstitucional, concretamente al Laboratorio Central de Aduanas del Servicio de Administración Tributaria (SAT), a fin de que los expertos efectuaran los correspondientes estudios. Después se confirmó que se trataba de la especie Dalbergia palo-escrito y no la especie descrita en la documentación que presentó en su momento el responsable, por lo que la PROFEPA presentó una denuncia formal ante la PGR por contar con elementos que evidencian el transporte ilegal de materia prima forestal maderable sin contar con la documentación y los sistemas de control establecidos que acreditaran la legal procedencia, sostiene. “Asimismo, cuenta con elementos de prueba para poner en marcha urgentes medidas de seguridad que frenen la tala y la transformación clandestina e ilegal de los recursos forestales maderables, a efecto de evitar la degradación de nuestro medio natural”. Y añade que el Código Penal Federal establece que, “a quien ilícitamente transporte, comercie, acopie, almacene o transforme madera en rollo o cualquier otro recurso forestal maderable en cantidades superiores a cuatro metros cúbicos, se le impondrá pena de uno a nueve años de prisión y de trecientos a tres mil días multa”.