CIUDAD DE MÉXICO (apro).- La Procuraduría Federal de Protección al Ambiente (Profepa) dio a conocer que inició una investigación contra la empresa responsable de transgredir la ley ambiental vigente al abandonar Residuos Peligrosos Biológico Infecciosos (RPBI) en un terreno baldío del municipio de Hermosillo, Sonora. En un comunicado, destacó que en atención a una denuncia que hizo la Policía Municipal, personal de la delegación federal de la Profepa en la entidad acudió al lugar donde se encontraron pañales, batas y jeringas, entre otros desechos, y constató la presencia de RPBI provenientes de varias clínicas del Instituto Mexicano del Seguro Social (IMSS), por lo que se procedió a la limpieza del sitio a través de especialistas. “Al momento de llevar a cabo el levantamiento de los RPBI, inspectores federales de esta Procuraduría encontraron evidencia de la presunta empresa responsable de haber dejado estos desechos hospitalarios a la intemperie”, apuntó. Y detalló que de acuerdo con la Ley General para la Prevención y Gestión Integral de los Residuos y la Ley General del Equilibrio Ecológico y Protección al Ambiente, las sanciones por verter o abandonar residuos en lugares no autorizados para ello oscilan entre los 20 mil y 50 mil días de salario mínimo. Hospitales y clínicas, ya sean públicos o privados, están obligados a contratar empresas especializadas y autorizadas por la Secretaría de Medio Ambiente y Recursos Naturales para la recolección, transportación y disposición final de los residuos peligrosos biológico-infecciosos, subrayó la Profepa. Asimismo, resaltó que el manejo inadecuado de ese tipo de residuos peligrosos puede causar un problema ambiental y de salud por la exposición a agentes infecciosos.