CIUDAD DE MÉXICO (apro).- El grupo de buscadoras de cuerpos y osamentas en el norte de Sinaloa conocidas popularmente como Las Rastreadoras fue propuesto para el Premio Nobel de la Paz. Mirna Nereyda Medina Quiñónez, fundadora y dirigente del grupo, dijo que una organización nacional que agrupa a 17 asociaciones estatales la propuso para el Premio Nobel de la Paz, por los resultados en la organización de las personas con familia desaparecida y la localización de 43 osamentas de las más de 200 personas de las que se desconoce su paradero en el norte de la entidad y cuyas autoridades estatales se niegan a reconocer. Ella y otra miembro del grupo se reunieron con el candidato del PAN a la alcaldía de Ahome, Miguel Ángel Camacho Sánchez, “Líder Camacho”, para buscar respaldo en su búsqueda. Y lo obtuvieron en especie, además de un compromiso moral de apoyarlas a cabalidad en caso de ganar la presidencia municipal, según información difundida por RíoDoce. El político condenó los casos de desaparición forzada y ofreció que si llega a la alcaldía actuará con todo rigor con todo aquel policía que se vea involucrado en actos similares. Desde septiembre del año pasado el grupo de mujeres explora los campos agrícolas de los municipios del norte de Sinaloa en busca de sus hijos desaparecidos. Son alrededor de 20 y forman parte del equipo operativo de un colectivo de más de un centenar de madres llamado Desaparecidos de El Fuerte. Mirna Nereyda creó la agrupación a partir de la desaparición de su hijo Roberto Corrales Medina, ocurrida el 14 de julio de 2014. El premio Nobel de la Paz es entregado casi todos los años por el Comité Nobel Noruego “a la persona que ha hecho el mejor trabajo o la mayor cantidad de contribuciones para la fraternidad entre las naciones, la supresión o reducción de ejércitos, así como la participación y promoción de congresos de paz y derechos humanos en el año inmediatamente anterior”.