CIUDAD DE MÉXICO (apro).— El Papa Francisco le pidió al presidente de la Federación Internacional de Fútbol Asociación (FIFA), Gianni Infantino, “limpiar los caminos” y “poner las cosas en orden, con honestidad” en ese organismo que rige al fútbol a nivel mundial y que actualmente está sumido en escándalos de corrupción. El encuentro entre Bergoglio e Infantino se realizó en una sala del Aula Pablo VI, del Vaticano, el pasado domingo. Ahí el Papa señaló que “el fútbol es un arma, en el buen sentido, educativa, de integración social con los chicos”. Infantino le respondió que, en ese sentido, su proyecto al frente de la FIFA es incidir precisamente en la “educación y el desarrollo” de los pueblos. Y agregó: “Esto es lo que podemos hacer juntos su santidad, educar y promover la integración social”. El Papa le comentó: “Bueno, usted puede con el fútbol ir adelante, mostrando honestidad y limpieza, ofreciendo todas estas posturas”. Durante el encuentro, Infantino le entregó al pontífice una de las medallas del campeón de la reciente Champions League europea, jugada en la ciudad de Milán el sábado pasado y en la que resultó ganador el equipo español Real Madrid. “29 medallas se fueron para el Real Madrid y ésta es para usted”, le dijo el dirigente al momento de entregarle la medalla. Al dirigente de la FIFA lo acompañaban su madre y su esposa Leena Al Ashar. El encuentro se dio en el marco del congreso internacional de “Scholas Ocurrentes”, una fundación pontificia que trabaja en el desarrollo de la juventud a través del deporte, la tecnología y las artes. A instancias del Papa, la FIFA planea realizar un Partido Interreligioso por la Paz, que se jugará en la ciudad de La Plata, Argentina, el próximo 10 de julio. En este encuentro participarán exestrellas y jugadores en activo del balompié mundial. Los fondos que se recauden serán destinados a causas benéficas. Por otro lado, el día de hoy, en su reflexión semanal de los miércoles, el Papa pidió saber rezar con “humildad”, pues la “oración del soberbio no llega al corazón de Dios”. Ante más de 15 mil personas congregadas en la Plaza de San Pedro, el Papa señaló que son “hipócritas” quienes solo rezan para “pavonearse ante el espejo”.