CIUDAD DE MÉXICO (apro).- El titular de la Fiscalía, Marco Antonio Higuera, minimizó la reciente ola de ejecuciones en Sinaloa al asegura que el gobierno no ha perdido el control de la seguridad a pesar de los 14 asesinatos registrados ayer. Este martes fueron ejecutadas 14 personas y se localizaron tres cadáveres en fosas clandestinas en los municipios de Culiacán, Cosalá y Mazatlán. Higuera Gómez admitió que desde el jueves por la noche se reforzaron los operativos de seguridad en la zona centro y sur de la entidad. El funcionario dijo que “es lamentable tener una jornada de ese tipo, pero es importante señalar que cada persona escoge su camino y el camino que escoja puede ser de bien o puede ser en actividades ilícitas, y en actividades ilícitas la persona puede concluir su camino de dos maneras: en la cárcel o que pierda la vida”. Luego justificó que “de ninguna manera implica esto que las acciones han fallado, lo único que hay que hacer es reforzar para estar pendientes de los enfrentamientos que entre ellos se están dando dentro de la rivalidad delincuencial”. También aseguró que el tiroteo en el que perdieron la vida tres personas en El Habal, en Mazatlán, fue entre grupos de narcomenudistas. “Estas tres personas que fallecieron derivado de un enfrentamiento entre grupos delincuenciales son gente dedicada al narcomenudeo, al comercio y su conducta estaba destinada a dañar la salud de nuestros jóvenes”, insistió. A los tres ejecutados les aseguraron 225 dosis de cocaína, mil 526 dosis de cristal, 39 mil 893 pesos en efectivo, 13 cargadores para AK 47 con 30 tiros cada uno, equipo táctico y cuatro vehículos. Enseguida destacó que el enfrentamiento que dejó cuatro muertos en Cosalá derivó de hechos que han ocurrido en Durango entre grupos delincuenciales opuestos.