CIUDAD DE MÉXICO (apro).- La generación de cajas de ahorro no son competencia de las delegaciones capitalinas, aseguró Eduardo Rovelo, contralor General del Gobierno de la Ciudad de México, por lo que el jefe delegacional en Cuauhtémoc, Ricardo Monreal, no está facultado para exigir a sus empleados hasta 30% de sus sueldos y destinar los recursos a esa forma de ahorro. De acuerdo con el funcionario capitalino, la Ley Orgánica de la Administración Pública capitalina  no otorga facultades a las delegaciones para administrar cajas de ahorro, además, la determinación de sueldos y salarios es competencia única de la Oficialía Mayor, por lo que jurídicamente no es procedente la generación de cajas de ahorro en la delegación. “Respecto a algunos servidores públicos de la delegación Cuauhtémoc que aportan de manera voluntaria hasta el 50 por ciento de sus salarios para destinarlo a la operación de programas sociales, eso no es posible”, dijo. El pasado 15 de septiembre, el ex director jurídico y de gobierno de Ricardo Monreal, Pedro Pablo de Antuñano, fuera detenido con 600 mil pesos en efectivo sin que pudiera explicar su procedencia y argumentó que ese recurso era parte de un donativo para una fundación o asociación civil. El viernes 23 de septiembre, el diario Reforma publicó una nota en la que se señala que Monreal “no sólo tiene dinero libre por si no llegan las tarjetas de apoyo a personas de la tercera edad, sino que también ofreció cooperar y organizar una caja de ahorro para trabajadores”. Días antes, Monreal fue captado en un video  en el que abiertamente dice que organizará una caja de ahorro en la que por cada 500 pesos que depositaran los trabajadores, él pondría 250. “Les voy a dar 250 pesos de entrada por el simple hecho de ustedes depositar 500, en la caja de ahorro tendrán 750 pesos; pero, por esa misma caja de ahorro la manejarán los trabajadores, yo solamente tendré el control para que no tengan dificultades con un administrativo”, aclaró el jefe delegacional. Al respecto, Rovelo explicó que, de conformidad con la ley, “los donativos en efectivo que reciban las dependencias, órganos desconcentrados, asociaciones y entidades deberán siempre enterarse a la Tesorería de la Ciudad de México, y los servidores públicos, en estricto cumplimiento al principio de legalidad, tienen que hacer lo que la ley determina”.