CIUDAD DE MÉXICO (apro).- La Fiscalía de Perú informó que investigará al expresidente Alejandro Toledo por los delitos de tráfico de influencias y lavado de activos en el caso de los sobornos de la empresa brasileña Odebrecht. A través de la red social Twitter, el Ministerio Público informó que el expresidente deberá responder por supuestamente haber favorecido los intereses de Odebrecht en Perú a cambio de recibir 20 millones de dólares. También se informó que el proceso se extiende a Jorge Barata, exdirector de las oficinas de Odebrecht en Perú, y contra Josef Maiman, el empresario amigo de Toledo señalado de fungir como testaferro del expresidente. Según la Fiscalía, Barata será investigado como supuesto cómplice primario del delito de lavado de activos y Maiman como autor primario de este delito. Mientras se definen las medidas que se tomarán respecto del expresidente y los otros acusados –que pueden incluir un pedido de búsqueda y captura internacional–, el gobierno peruano designó hoy a las procuradoras públicas que plantearán una eventual reparación civil para el Estado en el caso. El Ministerio de Justicia nombró a las abogadas Katherine Milagros Ampuero Meza y Liliana Elizabeth Meza Quito como procuradoras públicas, principal y adjunta, respectivamente, en las investigaciones por las denuncias de corrupción contra Odebrecht. El pasado sábado 4, las autoridades allanaron la casa del expresidente, y la documentación hallada será evaluada por el Ministerio Público. Luciano López, el abogado que defendía a Toledo desde 2013, renunció un día antes sin mencionar las razones. “Nuestra firma no dará ninguna declaración a a prensa sobre nuestro excliente por responsabilidad profesional”, destacó en un comunicado.