MADRID (apro).— El presidente del gobierno español, Mariano Rajoy, se desdijo hoy de su ofrecimiento a su homólogo estadounidense Donald Trump, de fungir como “interlocutor en Europa, América Latina, Norte de África y Oriente Medio”, como lo había informado su administración el día 6, cuando ambos mantuvieron una conversación telefónica. “Yo no me ofrecí como mediador de nadie. En lo que sí hice hincapié fue en las excelentes relaciones que España mantiene con América Latina, con los países del norte de África y con los socios de la Unión Europea”, aclaró en una entrevista con la televisora pública española. Mariano Rajoy calificó de “cordial” la conversación telefónica que mantuvo con el nuevo presidente de los Estados Unidos. Recordó que hablaron de la situación económica de ambos países, del Brexit y del futuro de Europa. Según Rajoy, Trump le expresó su intención de mantener “como siempre, unas buenas relaciones con el gobierno de España y también con todos los españoles”. Dijo que su obligación como presidente del gobierno es “llevarse bien con todo el mundo, no generar dificultades y defender los intereses de su país”. El mandatario español no se refirió a la exigencia que Trump le hizo para que incrementara el volumen de aportaciones a la OTAN, que es uno de los reclamos del estadunidense para que los socios de la Alianza Atlántica incrementen sus presupuestos. Trump ha calificado al organismo de “desfasado”. Sobre el desafío soberanista de Cataluña, Rajoy exigió el cumplimiento de la ley, ya que lo contrario liquidaría “las reglas de convivencia” y “ya no estaríamos en un estado de derecho y democrático”.