CUERNAVACA, Mor. (apro).- El alcalde Cuauhtémoc Blanco Bravo informó que el pasado fin de semana la Suprema Corte de Justicia de la Nación (SCJN) dio entrada a una controversia constitucional encaminada a echar abajo el decreto del Mando Único en esta capital. En conferencia de prensa, el exfutbolista informó que en diciembre pasado, cuando el Congreso local buscó destituirlo, el gobernador Graco Ramírez ordenó a Jesús Alberto Capella Ibarra, comisionado de Seguridad Pública, que tomara las instalaciones del ayuntamiento y le impidió desarrollar sus actividades. En respuesta, Blanco determinó destituir al titular de Seguridad Pública en la capital, Jesús Pérez Abarca, quien fue designado por el gobierno estatal. Sin embargo, el jefe policiaco continúa en su cargo, y eso “es una burla”, sostuvo el exseleccionado nacional. Blanco Bravo decidió acudir a la SCJN para echar abajo el decreto de Mando Único, y recordó que durante su campaña electoral recibió muchas quejas, pero la principal fue que “el Mando Único no estaba, no está cumpliendo con la seguridad de la gente. No funciona y lo hemos visto, la gente lo siente, lo sabe”. Por ello, agregó, desde el pasado lunes 13 interpuso la controversia y la Corte le dio entrada el viernes 17. “Hemos pedido que nos regresen la policía municipal y el gobernador (Graco Ramírez) se ha negado, pero no sólo eso, sino que abusa sobre el control (sic) que tiene sobre ella. Y nosotros sostenemos que eso está en contra de la Constitución, por eso le presentamos nuestros argumentos a la Suprema Corte y vamos a esperar, con respeto, su resolución. No existe ninguna razón para que el estado mantenga el mando sobre la policía municipal”, sostuvo. De acuerdo con el alcalde, a principios de 2016, cuando inició su administración, se mantuvo en su dicho de respetar la demanda de la gente de abolir el Mando Único. Sin embargo, en diálogo con las autoridades locales y federales concedió la posibilidad de darle una oportunidad a ese modelo. “Confié en el gobernador y se la entregué, pero me falló. La confianza que le tuve entonces hoy es decepción”, subrayó Blanco, y se manifestó frustrado por el Mando Único porque además hoy en día, apuntó, es un arma de presión política y no una herramienta para darle seguridad a la población de la capital. “Es un fracaso de ellos”, del gobierno estatal, insistió. La controversia constitucional busca que la Corte ponga por encima del decreto del gobernador el artículo 115 de la Carta Magna federal, que otorga la facultad de la seguridad pública a los municipios. En caso de que la SCJN conceda la suspensión del decreto, el gobierno de Cuauhtémoc Blanco estaría abriendo la puerta a otros municipios para hacer lo mismo. Con ello se rompería el modelo policiaco impulsado por Graco Ramírez, que si bien no ha reducido en nada los índices en materia delictiva, sí ha garantizado una bolsa millonaria de recursos al gobierno estatal, descontados a los municipios de sus fondos de seguridad pública desde que se impuso el Mando Único.