CIUDAD DE MÉXICO (proceso.com.mx).- El director del FBI, James Comey, pidió este fin de semana al Departamento de Justicia estadunidense que rechace la acusación del presidente Donald Trump contra Barack Obama de espiar sus conversaciones telefónicas. Trump pidió al Congreso que abriera una investigación, sin presentar pruebas, tras lo cual el Comité de Inteligencia de la Cámara de Representantes de Estados Unidos decidió que investigará si Obama ordenó intervenir los teléfonos de la Torre Trump. Según oficiales del FBI citados por The New York Times, Comey argumentó que la acusación de Trump “es falsa y debe ser corregida”. Comey pretende que el Departamento de Justicia diga que no es verdad que los teléfonos de Trump fueron intervenidos durante la reciente campaña electoral, como alegó Trump en cinco mensajes en la red social Twitter la madrugada del sábado. El Departamento de Justicia no había emitido hasta el momento una declaración sobre el tema. Por su parte James Clapper, exdirector de Inteligencia Nacional durante el gobierno de Obama, negó este domingo que se grabaran las conversaciones del ahora presidente Trump durante la campaña electoral. Comey jugó un papel central en la campaña presidencial cuando anunció, 10 días antes de las elecciones, que había reabierto la investigación sobre los correos electrónicos de Hillary Clinton.