MANZANILLO, Col. (apro).- Con su participación en tareas de seguridad pública, los elementos de las fuerzas armadas “están arriesgando su vida en favor del resto de los mexicanos, están haciendo todo en acciones que no les corresponden”, señaló el secretario de Gobernación, Miguel Ángel Osorio Chong. Por lo tanto, sin nombrarlo expresamente, convocó al Poder Legislativo a aprobar una Ley de Seguridad Interior que ofrezca certidumbre jurídica a las fuerzas armadas. “Es momento ya de actuar, es momento de darles el respaldo con decisión y dejar cálculos políticos y electorales para después, actuemos por quienes dan la vida por los mexicanos, por nuestras fuerzas armadas”, emplazó. Durante su participación en la firma del Convenio Regional en Materia de Seguridad Pública entre los gobiernos de los estados de Colima, Jalisco, Michoacán y Guanajuato, Osorio Chong advirtió que también es tiempo de que se logre un acuerdo sobre el tipo de institución que deberá definirse para la garantizar la seguridad de la ciudadanía. “Dejemos ya también la discusión y pasemos a la acción —urgió—, y me refiero a los tres órdenes de gobierno, a los tres poderes; si va a existir una policía estatal, que se logre ya la ley; si será con mando mixto, que también se logre, pero que se vean los alcances y dificultades en la alternancia entre lo estatal y lo municipal, esos cambios administrativos que generan descontrol y que acaba aprovechándolos la delincuencia”. Luego mencionó que si se va a quedar el mando municipal como está actualmente en el artículo 115 constitucional, se requiere dotar de capacidades institucionales a los municipios para que puedan con responsabilidad asumir lo que por ley les corresponde. El titular de la Segob manifestó que “aunque parezca increíble”, de los 2 mil 450 municipios del país, 600 no cuentan con corporación de seguridad; 900 corporaciones tienen menos de 20 policías y las otras 900 no están capacitadas, además de que la mayoría de las corporaciones municipales por falta de recursos mantienen en la misma responsabilidad a los elementos que no pasaron los controles de evaluación. “Tenemos que comprometernos todos —subrayó—, cada quien en lo que le toca: desde el gobierno de la República dejo el compromiso de seguir dando todo el respaldo de nuestras fuerzas armadas y de la Policía Federal a los gobiernos de los estados, pero también dejando claro que tiene que haber un plazo para su salida, para que se comprometan los estados y los municipios”. En la firma del acuerdo, además de Osorio Chong, participaron los gobernadores de Colima, José Ignacio Peralta Sánchez; de Jalisco, Aristóteles Sandoval Díaz, y de Michoacán, Silvano Aureoles Cornejo, así como el secretario de Gobierno de Guanajuato, Salvador García López. Miguel Ángel Osorio dijo que el acuerdo considera que estas entidades compartan información, conjunten esfuerzos y articulen acciones para hacer frente a la delincuencia en la región. “En lugar de estar echándonos culpas unos a otros, lo que vamos a estar haciendo es asumir responsabilidades y enfrentando a los delincuentes, que son los que lastiman a la sociedad y a los que tenemos que detener”, refirió. A juicio del secretario de Gobernación, garantizar la seguridad de la población es una tarea que convoca a todos, en la que no deben existir divisiones partidistas como lo desean los delincuentes, porque “quien pretenda lucrar políticamente con la seguridad, no sólo lastima a las instituciones, sino también a la sociedad”. También aseveró que el gobierno del presidente Enrique Peña Nieto ha acreditado que la seguridad no está al servicio de la política, por el contrario, la buena política está al servicio siempre de la comunidad, con la voluntad de dialogar, tender puentes y crear una agenda común y estrategias conjuntas. Según Osorio Chong, el convenio firmado este miércoles plantea actuar desde lo local, fortaleciendo la presencia territorial de las corporaciones de seguridad, generando una capacidad de respuesta más ágil, efectiva y mejor coordinada, impulsando la prevención del delito y la reconstrucción del tejido social, multiplicando las oportunidades y mejorando los espacios públicos. En el caso de Colima, explicó que las dos elecciones de gobernador que tuvo entre junio de 2015 y enero de 2016 generaron “una laguna” que fue aprovechada por la delincuencia y hubo un alza en diversos delitos, sobre todo en homicidios, rubro en el que según las cifras oficiales la entidad se ubicó en el primer lugar nacional. El fenómeno del alza delictiva, añadió, “está demostrado en los cambios de poder, por eso decimos que tenemos que generar instituciones más allá de los periodos de gobierno, más allá del mandato de uno u otro partido”. Luego afirmó que así como ha ocurrido en otros estados, se aplicará un plan estratégico para cambiarle el rostro a Colima: “No hay hilo negro que descubrir, hay acciones, hay contundencia, hay responsabilidad, hay coordinación, hay factores que permiten, que nos hacen ver que podemos salir adelante”.