MÉRIDA, Yuc. (apro).- Martín Alberto Medina Sonda fue imputado como probable autor intelectual del feminicidio de su exesposa Ema Gabriela Molina Canto, perpetrado por pistoleros a sueldo el pasado 27 de marzo. Medina Sonda, preso en el Centro de Reinserción Social del Estado de Tabasco (Creset), fue presentado mediante una teleconferencia ante el juez de Control del primer distrito judicial del sistema penal acusatorio y oral de Yucatán, Luis Edwin Mugarte Guerrero. En días pasados, el acusado –socio, operador financiero y presunto prestanombres de José Manuel Saiz Pineda, quien fue tesorero del gobierno de Tabasco en el sexenio de Granier Melo– fue condenado en Tabasco a 12 años y seis meses de prisión por el delito de operaciones con recursos de procedencia ilícita. Y si es encontrado culpable del feminicidio de su exesposa, Medina Sonda, podría pasar 55 años encerrado. La audiencia de imputación, programada para la tarde de ayer, inició con retraso –casi a las 8 de la noche– por diversos incidentes y fallas técnicas que se presentaron con el enlace. Fue la primera vez que en el sistema judicial yucateco se utilizó ese método de comparecencia. Uno de los incidentes surgió cuando los representantes de las víctimas señalaron al juez que el abogado Edier Josué Pech Farfán, designado por Medina Sonda para representarlo en Yucatán, tenía un impedimento legal para litigar, en virtud de que trabaja como agente investigador del Ministerio Público en la Fiscalía General del Estado. Una vez enterado, el juez explicó al imputado los perjuicios que en adelante le podría implicar la situación de su defensor. Aun así, aquel insistió en que su abogado lo representara. El juez tuvo que conceder tiempo al abogado para comunicarse en privado con su cliente y enterarse del caso, pues desconocía el contenido de la carpeta de investigación donde se asientan las declaraciones de los presuntos cómplices ya vinculados a proceso, quienes incriminaron a Medina Sonda como la persona que los contrató para asesinar a Ema Gabriela. En el Centro de Justicia Oral de Mérida (CJOM), la audiencia fue conducida por el juez Mugarte, que ordenó la aprehensión de Medina. Con la presencia de fiscales, la víctima y sus asesores jurídicos, además de un defensor particular, así como el imputado –en compañía de otro defensor particular– y su auxiliar, estuvieron en la sala de oralidad del juzgado de control de Tabasco. En ambos lugares la audiencia fue pública, con presencia de medios de comunicación y público en general, pese a que Medina Sonda solicitó al juzgador que retirara a los reporteros y que su audiencia fuera privada. La petición y la pormenorizada explicación que le dio el juez para denegársela prolongó más la audiencia, que por momentos se tornó intensa, como el instante en el que, como víctima indirecta, se dio a Ligia Canto –madre de Ema Gabriela– la oportunidad de encarar, a través del monitor, a quien fuera su yerno. “Mataste a mi hija, dejaste huérfanos a tres niños”, le lanzó quebrada en llanto. Desde Mérida, los fiscales le informaron a Medina Sonda que se había iniciado una investigación por su probable participación como autor material y directo del delito de feminicidio. En su relatoría de hechos argumentaron que el imputado pretendió reestablecer una relación de pareja o intimidad con su exesposa, y al no lograrlo planeó y ejecutó, junto con otras tres personas ya imputadas y una más que aún no ha sido detenida, privarla de la vida. El acusado se reservó su derecho a declarar y se acogió a la duplicidad que la ley determina para que se resuelva su situación jurídica, por lo que el juez fijó el próximo lunes 24 para resolver la solicitud planteada por los fiscales de vinculación a proceso. Por último, después de escuchar el debate entre las partes, el juez Mugarte Guerrero determinó que el imputado debe quedar sujeto a la medida cautelar de prisión preventiva hasta que se resuelva su situación jurídica en la audiencia de vinculación a proceso, si bien actualmente el detenido se encuentra preso.