CIUDAD DE MÉXICO (apro).- Con excepción de Rusia e Israel, que le otorgan más confianza que al expresidente estadunidense Barack Obama, el nuevo ocupante de la Casa Blanca, Donald Trump, es ampliamente impopular en el extranjero. Así lo destaca un sondeo del Pew Research Center realizado en 37 países, según el cual sólo 22% de las personas interrogadas declaró confiar en el magnate antiinmigrante para gestionar el rol de Estados Unidos en los asuntos mundiales. Se trata de un porcentaje muy inferior al 64% que inspiraba el expresidente Barack Obama en los últimos años de su gobierno, de acuerdo con Pew. "La parte de la opinión pública que tiene una opinión positiva de Estados Unidos se derrumbó en varios países, en América Latina, América del Norte, Europa, Asia y África", destaca. Señaló, asimismo, que la caída de la confianza en el jefe de Estado es particularmente pronunciada entre los aliados de Estados Unidos en Europa y Asia, así como en Canadá y México, mientras que Rusia e Israel son los únicos países en los que las personas interrogadas afirman tener más confianza en Trump que en Obama. En lo que atañe a medidas concretas propuestas por Trump, 76% de los encuestados declaró estar en contra de su proyecto de construir un muro en la frontera con México. Porcentajes similares de rechazo concitan su voluntad de retirar a Estados Unidos de varios tratados internacionales, del Acuerdo de París sobre cambio climático e incluso la prohibición de que ciudadanos de seis países musulmanes ingresen a territorio estadunidense. En Estados Unidos, un sondeo publicado la semana pasada por CBS otorgó 36% de opiniones favorables a Trump, el porcentaje más bajo desde que se instaló en la Casa Blanca, de acuerdo con un despacho informativo de AFP. En febrero pasado, una encuesta de Gallup y Huffpost Pollster también reveló que tras un mes en el poder, Trump tenía una popularidad de 44.6%. La cifra contrastaba con la del mismo periodo de Barack Obama, quien en ese entonces tuvo un 68% de popularidad. Desde el pasado 20 de enero, cuando asumió el poder, el magnate llegó a la Casa Blanca como el más impopular mandatario en cuatro décadas, sin embargo, la mayoría de los estadunidenses cree que podrá recuperar los empleos perdidos en las zonas más afectadas del país.