Vigilancia cibernética gubernamental

sábado, 22 de julio de 2017 · 10:46
CIUDAD DE MÉXICO (Proceso).- El gobierno federal se asoció con Facebook, Twitter y tiendas departamentales para instaurar un protocolo de vigilancia de redes sociales que depende de las polémicas políticas de filtro de contenidos de esas empresas. El protocolo de actuación y ruta crítica para la atención de eventos físicos y virtuales que pongan en riesgo la seguridad ciudadana y el patrimonio de personas físicas y morales, de sólo cinco páginas, estipula que sucesos cibernéticos violentos que quebranten las normas de uso de ambas redes sociales ameritan el reporte del perfil de la cuenta originadora de esas conductas. Las divisiones Científica y de Gendarmería de la Policía Federal (PF),  así como la Dirección General de Innovación, Servicios y Comercio Interior de la Secretaría de Economía, la Asociación Nacional de Tiendas de Autoservicio y Departamentales, la Asociación de Internet Mx, Facebook (FB) y Twitter implantaron esos lineamientos luego de que en enero pasado diversas personas convocaron vía Twitter a saquear tiendas y organizaron actos de vandalismo, especialmente en el Estado de México, para protestar por el aumento del precio de las gasolinas. Mediante solicitudes de acceso a la información, Proceso obtuvo documentos sobre la forma en que el gobierno vigila las redes sociales. Las directrices estipulan la homologación de criterios para determinar el grado de violencia de los incidentes reportados por FB y Twitter, identificar y mapear zonas con prevalencia delictiva vinculada a esos acontecimientos y seleccionar a las cuentas influyentes en el ciberespacio. El protocolo enumera siete pasos para denunciar acontecimientos en redes sociales, comenzando por identificar “cualquier suceso, vulnerabilidad o riesgo” que derive en daños por “manifestaciones, bloqueos y/o saqueos”. Luego se debe priorizar el tipo de impacto –bajo, medio o alto–, el reporte debe incluir la descripción del incidente, fecha y hora, datos de personas y perfiles, imágenes, dirección de internet o una liga, así como la ubicación física y el nivel de prioridad. En consecuencia, la División Científica de la PF verificará la denuncia, acopiará la evidencia digital y abrirá una investigación y, de ser necesario, recomendará la presentación de una denuncia ante la Procuraduría General de la República. Un sistema poroso FB y Twitter tienen dificultades para poner filtros al contenido relacionado con la incitación a la violencia, odio racial o la discriminación, según publicó el pasado 21 de mayo el diario británico The Guardian. Por su parte, Twitter enfrenta problemas para controlar los llamados bots –aféresis de robots–, cuentas creadas por programas informáticos para debilitar o potenciar temas. En enero pasado, se publicaron miles de mensajes para convertir en tendencia a hashtags como #SaqueaUnWalmart y #SaqueosEnMéxico. Loquesigue, colectivo de análisis de internet y redes sociales, identificó mil 500 mensajes relacionados con esos hashtags provenientes de cuentas nuevas y con poca actividad en sitios ubicados en las delegaciones Azcapotzalco y Gustavo A. Madero. El protocolo indica que FB censura actividades delictivas o terroristas, amenazas violentas directas o indirectas, acoso, incitación al odio y suplantación de identidad. “Revisamos detenidamente los reportes de lenguaje intimidatorio para identificar amenazas graves para la seguridad pública y personal. Eliminamos las amenazas creíbles de daños físicos a personas. También eliminamos determinadas amenazas de robo, vandalismo u otros daños económicos”, explica el documento. De la información disponible se desprende que FB puede rastrear la geolocalización del usuario de una cuenta. Asimismo, cuando una cuenta sospechosa sigue activa después de 24 horas, se deberá reenviar la información a FB o Twitter para su seguimiento. El estudio Propaganda informática mundial, divulgado el 19 de junio último por el Proyecto de Investigación sobre Propaganda Informática del Instituto sobre Internet de Oxford –de la universidad inglesa del mismo nombre–, descubrió cómo cuentas altamente automatizadas en Estados Unidos se movilizaron desde redes sociales periféricas para engarzarse con grupos importantes de personas y rastrearon la fuente de algunas formas de noticias, así como cuentas robotizadas hasta programadores y empresas en Alemania, Polonia y Estados Unidos. En siete países, hay evidencia de que los bots han sido usados para manipular la discusión en línea. Algunas plataformas cibernéticas son enteramente controladas por gobiernos y lanzan campañas organizadas de desinformación, como en Rusia o Polonia. En México hay unos 70 millones de internautas. FB acapara 95% de usuarios de redes sociales, mientras que WhatsApp capta 93%; Youtube, 72%; y Twitter, 66%. Cibercolectivos en la mira El gobierno, junto con FB y Twitter, presuntamente detectó el origen de los llamados a los actos de saqueo de enero pasado: los colectivos cibernéticos Legión Hulk y Secta100tifika, que operan en ambas redes. Los documentos obtenidos a través del Instituto Nacional de Transparencia, Acceso a la Información y Protección de Datos Personales indican que la Policía Cibernética de la PF coadyuvó en la integración de una averiguación previa sobre ambos colectivos en 2016 y otra en 2017, pero decidió reservar sus investigaciones. “La existencia de diversos colectivos cibernéticos ha originado la creación de tales legiones, lo cual crea ‘un riesgo inminente y permanente’, pues deriva en la manipulación para realizar diversos actos delictivos por medios electrónicos y cibernéticos”, argumenta la PF. Esa institución reconoce la vulnerabilidad social ante las nuevas tecnologías e internet y arguye que revelar las investigaciones redundaría en “la sobreexposición de las acciones de los colectivos y las legiones”, además de originar “mayores” grupos. Esas agrupaciones –heterogéneas y casi anárquicas– se organizan para denunciar lo que consideran injusticias, burlarse de cibernautas y trolear por diversión. Algunos de sus integrantes se dedican al movimiento de bots para tumbar tendencias en Twitter o para acosar a activistas, sobre todo mujeres. Loquesigue detectó que simpatizantes de la legión difundieron en enero fotos y videos falsos en Huixquilucan y Naucalpan para alimentar el pánico y los saqueos. Académicos y activistas han documentado la presencia de Legión Hulk en campañas en Brasil, Colombia y Perú. El 20 de enero último, el grupo MexicanHackers reveló en Twitter que un individuo con las iniciales DFRS, originario de Ciudad de México, lideraba la legión. FB cuenta actualmente con 4 mil 500 fiscalizadores de contenido, que trabajan principalmente en Texas, y ya anunció la contratación de 3 mil más. Este reportaje se publicó en la edición 2124 de la revista Proceso del 16 de julio de 2017.

Comentarios