CIUDAD DE MÉXICO (proceso.com.mx).- En su primera misa dominical en la Catedral Metropolitana luego de que esta semana rindiera declaración ante la Procuraduría General de la República (PGR) por encubrimiento de pederastia, el arzobispo primado de México, Norberto Rivera Carrera, hizo un llamado a la comunidad eclesiástica a escuchar “por encima de todo a su maestro”. Antes de iniciar la homilía, activistas se manifestaron afuera de la Catedral para reclamar al prelado y al Papa Francisco por los casos de pederastia Ante una iglesia con cientos de feligreses y sin hacer mención de la denuncia penal que cuatro personas interpusieron en su contra por el encubrimiento a 15 sacerdotes de su arquidiócesis que supuestamente cometieron actos de pederastia, Rivera Carrera dijo: “La Iglesia, para realizar sus proyectos, para cumplir la misión que Dios le encomendó por supuesto que debe escuchar atentamente a los historiadores, sociólogos, artistas, políticos, pero por encima de todos debe escuchar a su maestro, a aquellos que tienen palabra de vida eterna”. [video width="848" height="480" mp4="https://cdn.proceso.com.mx/media/2017/08/video-contra-Noberto-Rivera.mp4"][/video] Agregó que en la vida “a veces se enfrentan momentos difíciles que por medio de la fe se deben superar”. Apenas el viernes pasado, Apro informó que la subprocuradora Sara Irene Herrerías aseguró que la PGR llevaría el debido proceso la demanda penal contra el cardenal. El 2 de junio cuatro personas, entre ellos el exsacerdote Alberto Athié Gallo y Valentina Peralta, coordinadora de la Red Eslabones por los Derechos Humanos, denunciaron que Rivera Carrera no dio aviso a las autoridades civiles mexicanas de los actos de pederastia cometidos por 15 sacerdotes, aun cuando tuvo conocimiento de ellos. El 26 de julio, Rivera Carrera emitió una primera declaración en la sede de la Arquidiócesis en esta capital. Antes de la misa, un grupo de activistas también le reprochó su silencio ante las violaciones de los curas mexicanos, reclamos que el prelado no respondió.