Los excluidos de la Universiada

domingo, 20 de agosto de 2017 · 11:52
En el ámbito universitario, el Consejo Nacional del Deporte de la Educación ha hecho del ninguneo un arte. Es el caso de los atletas excluidos para la Universiada Mundial 2017, quienes, a pesar de estar clasificados, al final fueron eliminados. Algunos de ellos iniciaron su defensa legal para evitar, dicen, que las tropelías de ese tipo se repitan en el futuro. CIUDAD DE MÉXICO (Proceso).- La conformación de la delegación mexicana que participará en la Universiada Mundial 2017 provocó irritación en atle­tas de algunas disciplinas, quienes a pesar de cumplir con los requisitos de elegibilidad y haber participado en los procesos selectivos, quedaron fuera de esa justa. Estas irregularidades evidencian la opacidad con la que trabaja el Consejo Nacional del Deporte de la Educación (Condde): no rinde cuentas a sus atletas y cuando se niega a inscribirlos, como en este caso de a Universiada Mundial, olvida comunicarles por escrito cuáles son los motivos de su marginación. Los casos más significativos son los de la nadadora Diana Luna y los taekwondistas Brenda Lúa Ortega, Ana Sarahí Pérez Hernández, Jorge Hernández Ramírez y Alejandro Aranda. A Luna –elegida por la Federación Mexicana de Natación (FMN) junto con nueve compañeros de la misma disciplina que ella practica–, el Condde se negó a inscribirla, pese a que la atleta y la Universidad Popular Autónoma del Estado de Puebla (UPAEP) documentaron que sí cumple con los criterios de la Federación Internacional de Deporte Universitario. En el taekwondo, aun cuando los cuatro deportistas cumplieron con las etapas de selección –desde intramuros hasta Universiada Nacional–, el 7 de julio el Condde envió una carta a Pérez, Hernández y Aranda para decirles que el día 13 de ese mes debían someterse a una evaluación ante los seleccionados nacionales de su categoría y el ganador obtendría el derecho a participar. A Lúa Ortega, el organismo simplemente la ignoró y por dedazo nombró a Itzel Manjarrez en su lugar. Pérez se rehusó a participar en la evaluación: “(No quiero) formar parte del teatro en el que participan administrativos, entrenadores, compañeros de selección y jueces”. Hernández y Aranda perdieron sus respectivos combates. Vladimir Ortiz, quien entre junio de 2011 y octubre de 2013 fue director de alto rendimiento de la Comisión Nacional de Cultura Física y Deporte (Conade), revela que los criterios en los selectivos para la Universiada Mundial siempre han sido ambiguos y que prácticamente el único requisito inexcusable para asistir es que el atleta esté matriculado en una universidad. Los criterios de selección pueden ser sujetos de cambios si una federación, entrenador o dirigente deportivo interviene. El desorden alcanzó tal nivel, que en 2013 la Conade publicó en internet los criterios del proceso selectivo por disciplina y posteriormente dio a conocer los nombres de los seleccionados. Sólo lo hizo en esa ocasión. El exdirector de la Conade, Nelson Vargas, explica que el selectivo para asistir a la Universiada Mundial solía ser la Universiada Nacional: el mejor de una disciplina y categoría ganaba el derecho a competir. Sin embargo, admite, para elegir a un seleccionado de un deporte que no forma parte del programa del Condde, la Conade se ponía de acuerdo con el organismo deportivo respectivo para designarlo. Algunas veces por petición de algún funcionario o rector se benefició por dedazo a atletas que no cumplían con los parámetros. Deporte a la deriva Vargas sostiene que desde 2008 la Conade perdió control sobre el Condde y se multiplicaron los casos de abusos a atletas, que se recrudecieron este año con Manuel Merodio Reza como secretario general ejecutivo del organismo responsable del deporte universitario. La natación no está entre las disciplinas que forman parte del Condde porque no todas las 320 instituciones públicas y privadas que lo integran cuentan con alberca ni entrenadores; sin embargo este año la FMN entregó al Condde una lista de 10 nadadores mexicanos, de los cuales ocho estudian en universidades de Estados Unidos, mientras Ramiro Ramírez está matriculado en el Tec Milenio y Diana Luna en la UPAEP. Con el argumento de que no son competitivos, Merodio Reza se negó a inscribir a los nadadores. Entonces Vargas, quien acepta que no tiene ninguna autoridad ni le correspondía intervenir, lo llamó y le dijo que cometía una injusticia. El secretario del Condde insistió en que ninguno aspira a obtener medalla y no se pagarán viajes a atletas de baja calidad. Cuenta Vargas: “Le pregunté que en comparación con quién no tienen calidad. Le dije que hay deportes –los de conjunto, por ejemplo– que a veces no ganan ni un partido y aun así van. Él señaló que la natación ni siquiera está en las disciplinas del Condde; yo le dije que, igual sucede en clavados, pero como ahí sí se ganan medallas, lleva equipo completo. ‘Usted no me va decir cómo hacer mi trabajo y si quiere que vayan, págueles el viaje’, me dijo”. El exdirector de la Conade le mandó un archivo con información a Alfredo Castillo, el actual titular, con los nombres y marcas de los 10 nadadores. Le explicó que podrían quedar alrededor del lugar 25 o 30 y solicitó su inclusión en la delegación que viajará a Taipéi, sede de la Universiada Mundial 2017. “La Conade y Castillo solucionaron el tema”. Entonces comenzó la fase de entrega de documentos para cumplir con los requisitos de inscripción. Tres días antes de que venciera el plazo para realizar el trámite, Vargas envió un archivo en formato pdf a Diana Luna Sánchez en el cual el Condde informaba que la atleta no es elegible para participar. La afectada comenta: “No me contactaron personalmente ni a través del área de deportes de mi universidad, que les mandó la documentación. Después, desde mi correo, les mandé tres o cuatro mails preguntando por qué no soy elegible. No me contestaron. Toda mi documentación está en orden y no hubo interés de parte del Condde para inscribirme… No hay respeto por el esfuerzo y en el escritorio te dejan fuera. No dan la cara”. El jueves 3 Luna Sánchez envió una carta al rector de la Universidad de Chihuahua y presidente del Condde, Luis Alberto Fierro Ramírez, a quien enteró de la situación y le pidió que explicara por qué no fue inscrita. La deportista le dijo que fueron violados sus derechos fundamentales, pues no se le concedió la garantía de audiencia. Esta misiva es el primer paso de la atle­ta para defenderse. Aunque es irreparable el daño de no participar en la Universiada –que se desarrollará entre el domingo 20 y el sábado 26 y cuya delegación será abanderada este lunes 14–, Luna emprenderá acciones legales para sentar un precedente. Su propósito es evitar que el Condde vuelva a tomar una decisión unilateral de excluir a los deportistas seleccionados sin informarles las causas. Optimismo impostado  El 19 abril pasado, 11 días antes del inicio de la Universiada Nacional 2017, Manuel Merodio recordó que esa justa “forma parte del calendario de competencias avaladas por el Condde para integrar la delegación mexicana a la Universiada Mundial”. En un comunicado de prensa, Merodio Reza festejó la participación de 7 mil estudiantes en 22 disciplinas: “Las etapas de selección –desde intramuros hasta regionales– fueron un éxito porque se cumplió con el objetivo de dar la oportunidad de participación a estudiantes deportistas de este movimiento con 320 instituciones de educación superior de todo el país”, detalló. Pero sus acciones contradicen sus palabras. En el taekwondo, los atletas que ganaron el oro en la Universiada Nacional en las categorías mencionadas no estarán en la Universiada Mundial. Su lugar será tomado por integrantes de la selección nacional que no estuvieron en las etapas intramuros, estatal, regional ni nacional porque así lo decidió el Condde sin avisar a los atletas. Si bien se diseñó un anexo técnico para la Universiada Nacional 2017, éste no especifica que el ganador asistirá al evento internacional. El exentrenador nacional José Luis Onofre sostiene que para determinar quiénes asistirán, de forma verbal la Conade, el Condde y la Federación Mexicana de Taekwondo se ponen de acuerdo. Así, el comisionado de taekwondo del Condde –cargo que ahora ocupa José Alejandro Guízar Villicaña, de la Universidad Michoacana– acuerda con las autoridades deportivas en qué categorías los campeones nacionales de la Universiada se enfrentarán en una evaluación a los seleccionados nacionales. Lúa ni siquiera tuvo esa oportunidad, pues no recibió ninguna explicación; tampoco la Universidad del Valle de México, cuando un representante de la institución se presentó en las oficinas del Condde. La jefa del Departamento Técnico del Consejo, Pamela Aguirre Aguayo, no recibió los papeles, sólo le informó que “la olímpica” (Itzel Manjarrez) asistiría a la Universiada Mundial. Manjarrez, quien está matriculada en la Universidad Nacional Autónoma de Sinaloa, será la abanderada de la delegación de 211 atletas que asistirá a la Universiada Mundial. Ana Sarahí Pérez se indignó tanto, que decidió no presentarse a la evaluación para enfrentar a Victoria Heredia. Pérez llamó por teléfono al comisionado Guízar, quien le dijo que él no decidió nada. La comunicaron con una empleada del Condde –cuyo nombre se reserva– y le preguntó con base en qué criterios se tomó la decisión de realizar una evaluación contra Heredia, quien no participó en el selectivo. “Tú no ganaste nada para ir a ningún lado –me respondió–. Fue muy grosera. Le pregunté dónde podía leer las políticas o criterios del selectivo y dijo que eso no lo decide Condde, sino Conade. Llamé a la Conade y me dijeron que el Condde fue el que decidió. Varias personas me dijeron que no es personal, que así funciona esto. No hay nada por escrito, decidieron hacer la evaluación porque sí”, explica Pérez. La atleta indica que su escuela –el Tecnológico de Monterrey Plantel Puebla– detectó que hacía poco tiempo que Heredia se había cambiado de universidad y que, según los criterios, estaba impedida para representar a la nueva institución por un periodo de dos años. Se denunció esta irregularidad ante el Condde; tampoco contestó. “Todo lo que hicieron es ilegal. Por lo que le hicieron a Brenda quise saber quién determinó por qué ella no se evaluaría y yo sí. Nadie me resolvió nada, por eso ya estoy con un abogado emprendiendo acciones legales para reclamarle al Condde por tomar decisiones unilaterales. Es un procedimiento largo. No voy a la Universiada Mundial, pero no importa. “No me importa cuánto tiempo me tome el procedimiento. Quiero que no sigan haciendo esto. Tengo documentos y las grabaciones de las llamadas serán mi evidencia. El Condde puede decir que yo me equivoqué, que ellos actúan legalmente, pero no.” Otras ausencias Las hermanas Sheila y Frania Tejeda Riverón tampoco asistirán a la Universiada Mundial en esgrima, en la modalidad de espada. La primera no participó en el selectivo porque su escuela no forma parte del Condde. Sin embargo, esto no le impide participar en la competencia internacional. Es la primera del ranking nacional en esa rama. La segunda es seleccionada juvenil, ocupa el segundo sitio en el ranking nacional y es campeona nacional universitaria. Como ninguna de las dos fue inscrita, su madre, Sheila Riverón, envió el 4 de julio una carta al titular de Educación Pública, Aurelio Nuño, para expresarle su inconformidad. La dependencia turnó su caso a la Conade para que lo atendiera. El 18 de julio la Subdirección del Deporte pidió a Merodio que se hiciera cargo e informara sobre el proceso a la interesada y a la dependencia. El funcionario hizo caso omiso, pues nunca tomó la llamada de Riverón. Los empleados del Condde que la atendieron le decían que el secretario general estaba fuera de la ciudad y que no sabían si había leído el oficio que mandó la Conade. La comisionada de esgrima del Condde, Angélica Larios, explica que en dos juntas técnicas previas a la Universiada Nacional el Condde determinó que sólo asistirían a la Universiada Mundial los esgrimistas mejor ubicados en el ranking internacional. Se decidió llevar a cuatro atletas de la rama femenil, tres en florete y una en sable. Y aclara que desde el principio se informó que nadie más podría asistir ni pagándose el viaje. Larios asegura que hace meses le comunicó por teléfono esto a la señora Riverón, pero que no está segura de que la información haya llegado por escrito a todos los atletas y sus universidades porque hubo poca asistencia a las juntas, pero que, en teoría, los coordinadores regionales debieron haber informado a las escuelas. “La esgrima regresó al programa del Condde después de 10 años que estuvo fuera por la baja participación de las universidades. No todas las escuelas cuentan con la estructura ni tienen un representante que vaya a las juntas y se entere de los criterios. “Hay cosas que se pueden corregir (para que la información llegue al atleta), pero espada no va porque es el arma con el peor desempeño, aunque estas chicas sean buenas a nivel nacional en el ranking internacional no lo son, porque la espada es la que menos apoyo ha tenido a nivel federado. La Universiada Mundial no es para fogueo”, detalla Larios. El 5 de septiembre de 2016, después de cuatro meses de fungir como secretario general interino del Condde, Merodio fue ratificado en el cargo. Pronunció un discurso en el que se comprometió a trabajar “para consolidar al deporte de nivel superior”. Y añadió: “Sé que tengo muchos retos por cumplir al frente de esta responsabilidad, y lo haré con mucho respeto, pero con decisión en favor del desarrollo de los estudiantes deportistas de todo el país”. Nelson Vargas insiste: “El Condde no puede seguir operando así. Debe coordinarse con el máximo organismo del deporte que es Conade. Es una asociación civil, igual que cualquier federación; no puede mandarse solo. Se tiene que revisar cómo está operando el Condde y cambiarlo porque es un verdadero desastre”. Este reportaje se publicó en la edición 2128 de la revista Proceso del 13 de agosto de 2017.

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