CIUDAD DE MÉXICO (apro).- Luego de que el presidente de Estados Unidos, Donald Trump, anunció el fin del Programa de Acción Diferida para Llegados en la Infancia (DACA por sus siglas en inglés), los medios de comunicación estadunidenses consideraron que es una acción de cobardía y crueldad. Para The New York Times, Trump “ni siquiera tuvo las agallas para hacer el trabajo él mismo”, y optó por enviar a un proclamado antiinmigrante “a hacer el trabajo sucio”, toda vez que el anuncio del término del DACA estuvo a cargo del procurador general, Jeff Sessions. El rotativo agregó que, pese a que el programa no fue la mejor solución para la situación que enfrentaban estos jóvenes, fue la única “opción humana” ante el fracaso del Congreso para aprobar una reforma migratoria significativa en las pasadas dos décadas. Con el DACA, creado en el 2012 por el presidente Barack Obama, más de 800 mil jóvenes que llegaron a Estados Unidos siendo menores de edad -muchos de ellos de padres mexicanos- regularizaron por periodos de dos años su presencia en Estados Unidos. Ayer, el fiscal general de ese país, Jeff Sessions, anunció esta mañana el fin del programa que protegía de la deportación a los llamados “dreamers”, por lo que el gobierno de Trump no recibirá nuevas solicitudes para aplicar al DACA. “La nación tiene que mantener un límite en el número de personas que entran, pero eso no quiere decir que la decisión se tome porque son malas personas”, dijo Sessions. En opinión de Los Angeles Times, el anuncio hecho el martes “fue un acto de pura crueldad por parte de Trump”, que amenaza el bienestar de estos jóvenes inmigrantes, quienes están en el país no por culpa suya, sino como resultado de decisiones de sus padres. “Al parecer, el presidente no tuvo el coraje de ponerse de pie frente a las cámaras y deshacerse públicamente de los sueños de cientos de miles de personas, de modo que el procurador General, Jeff Sessions, hizo el anuncio en un discurso bajo en detalles y alto en elogios de su jefe”, indicó el rotativo. Para The Washington Post, Trump puso en marcha “una sentencia de muerte en cámara lenta, a menos que el Congreso pueda superar el impasse en el tema”. Como otros medios, el WP acusó a Trump de falta de coraje al dejar el anuncio en manos de Sessions, “un antiinmigrante extremista que pareció deleitarse hundiendo un cuchillo sobre DACA”. “La orden de Trump es un asalto sobre la razón económica. Al trastornar los prospectos de educación y de empleo de mucha gente joven prometedora, Trump ha arrebatado sus prospectos educativos y puesto en peligro sus empleos. Ahora, a menos que el Congreso actúe, Estados Unidos sufrirá junto con los ‘dreamers’”, advirtió. USAToday, en tanto, estimó que el anuncio del martes fue una suerte de búmeran lanzado por Trump contra sí mismo y su partido, haciendo notar que esta decisión, sumada al perdón que otorgó al exalguacil Joe Arpaio, “parecen destinados a lastimar al Partido Republicano con estos votantes durante años”. Puso en duda que el Congreso dé respuesta legislativa a la situación de estos jóvenes, y advirtió del fracaso del razonamiento de Trump de que podrá usar a DACA como moneda de cambio para presionar a los legisladores a aprobar los fondos para la construcción del muro en la frontera con México.