ZACATECAS, Zac. (apro).- Osvaldo salió de la escuela primaria y llegó a su casa en la comunidad El Centro, en Fresnillo, con su hermano menor. Salió al poco rato y no lo volvieron a ver, hasta que lo encontraron colgando de un huizache. Tenía 10 años de edad; aparentemente tomó una soga y se colgó del árbol, sin que sus padres, abuelos y hermanos sepan todavía por qué. El miércoles 8 ya lo estaban velando en la casita donde vivía, en la calle Juárez de esta comunidad rural de no más de 800 habitantes, ubicada a una hora de la cabecera de Fresnillo. El aviso fue hecho a las autoridades a través del número telefónico 911, poco después de las cuatro de la tarde del martes 7. Cuando los agentes de la Policía Ministerial llegaron, el cuerpo de Osvaldo ya estaba en una cama. Su padre lo había bajado del árbol. El hombre contó que Osvaldo había llegado de la escuela, se quitó el uniforme y al poco rato volvió a salir. Antes de las tres de la tarde, su vecino Pascual llegó corriendo a la casa y avisó que el niño pendía de una soga en un huizache ubicado cerca del expendio de cerveza. El padre del menor se encontraba trabajando en el acarreo del frijol. En cuanto supo corrió a bajarlo; cortó la soga y creyó que aún podría reanimarlo, pero no lo logró. Una versión citada por un diario local refiere que el menor habría tomado la soga para empacar de la casa, y que se dirigió al huizache, donde colocó una piedra para amarrar la cuerda e impulsarse. La Procuraduría de Justicia inició una carpeta de investigación con el suicidio como línea principal. Compañeros del quinto año de primaria de Osvaldo y su maestro fueron interrogados, sin que ninguno señalara una conducta depresiva o síntomas; por el contrario, describieron al niño como alegre y normal. La autopsia practicada al cuerpo no arrojó datos sobre la posible intervención de otras personas en la muerte de Osvaldo.