QUERÉTARO, Qro. (apro).- En el gobierno del panista Francisco Domínguez Servién, realizar una alta o baja de placas o el cambio de propietario de un auto implica esperar hasta seis horas, aunque el trámite real se lleva de seis a 20 minutos. Así lo aseguraron varios usuarios a la salida del sótano del auditorio Josefa Ortiz de Domínguez, habilitado desde hace algunos años para realizar esos trámites. Eduardo Prieto, quien acudió a las oficinas para dar de baja las placas de su vehículo, relató que al llegar hizo una larga fila para que le dieran turno. Cuando a la ventanilla, dijo, le checaron los documentos y luego lo mandaron a las cajas, pero la espera fue muy larga. “Después de que me revisaron los documentos me hicieron pasar a las cajas y me tuve que esperar, otra vez, quinientos turnos”, dijo molesto. Una mujer que acudió a realizar el trámite de cambio de propietario señaló: “Tuve que pasar a dejar a mi hija a la escuela. Después estuve esperando a que me tocara el turno. Me dieron casi diez y media. Tuve que regresar por mi hijo para traerlo aquí y que de aquí pudiera irse a la secundaria, porque él entra a la 1:20”. Mientras esperaba pasar, la mujer entretenía a su hija menor con un teléfono móvil, pero después de llevar a su otro hijo al colegio perdió el turno y tuvo que reiniciar los trámites. “Después de una hora ya no te deja volver a tomar tu turno. Entonces tuve que volver a realizar otra vez el trámite desde el principio. Aquí tuve que tener a mi hija porque pues ya había salido (de la escuela). Ya me dio aquí la una de la tarde, pasaron a recogerla y me la trajeron aquí”. Otra persona subrayó: “La última vez que yo realice el trámite por cambio de propietario fueron casi 700 pesos, ahorita ya literalmente se duplicó”. Según los usuarios, el personal no orienta a la gente y nadie les explica por qué los trámites que solo se llevan algunos minutos implican una espera de horas. “Es una fuente recaudadora de millones de pesos a diario, pero no han invertido ese dinero en el factor humano que se necesita. Las autoridades se han olvidado por completo. Esto sigue igual hace como cinco, ocho años atrás”, precisó Roberto Licea Velázquez. Luego de que personal de Finanzas que labora en el auditorio Josefa Ortiz de Domínguez identificó a Javier Marra Olea como el responsable del funcionamiento de las oficinas, se le solicitó una entrevista, pero a través de su secretaria indicó que debía ser requerida al área de comunicación social. El pasado jueves 18 se ingresó la solicitud por escrito a esa área que encabeza la arquitecta Rosario Mariela Morán Ocampo, pero hasta ahora no hay respuesta. Al propio gobernador Francisco Domínguez Servién se le cuestionó por la lentitud en los trámites, pero el mandatario rechazó responder a dos preguntas sobre el tema. En lugar de eso ofreció responder en una “conferencia de prensa”, excusa que ha comenzado a ser reiterativa entre los gobiernos panistas del estado para evadir diversos temas. Los ciudadanos entrevistados por Apro hicieron diversas propuestas para que el servicio mejore, entre ellas que un solo servidor público sea el que reciba la documentación, la revise y también cobre, para que no tengan que formarse tres veces. Además, subrayaron, debe hacerse una reestructuración del personal de la oficina recaudatoria porque hay servidores públicos que no están haciendo “absolutamente nada”. Y pidieron abrir oficinas en otros lugares, porque el gobierno concentra todos los trámites en ese único lugar y la gente tiene que trasladarse desde la sierra hasta la capital. Incluso hubo quien propuso que se implementara una aplicación digital que evite toda esa tramitología. “Es cuestión de actitud y de quererlo hacer”, destacó Eduardo Prieto.