CIUDAD DE MÉXICO (apro).- José Antonio Meade, candidato presidencial del PRI, consideró que el plan de su contrincante, Andrés Manuel López Obrador, de congelar el precio de los combustibles para evitar gasolinazos, es una “mala idea”. Por el contrario, aseguró que, de ganar las elecciones, en su gobierno no habrá control de precios de la gasolina, pues este dependerá del mercado internacional del petróleo. “Administrar los precios desde el gobierno es una mala idea y es una decisión, además, que se legisló hace varios años y que implica en consecuencia que ya no está en manos del gobierno administrar ese precio”, afirmó. Considerado por sus opositores como “el padre del gasolinazo”, el exsecretario de Hacienda y Crédito Público justificó que con la aprobación de la reforma energética, el gobierno dejó de tener la facultad de fijar precios. La prensa le lanzó la pregunta: -¿Seguiría habiendo aumentos de precios (de la gasolina)? -No, seguiría moviéndose conforme al precio internacional, para arriba o para abajo, según suceda. Y agregó: "El precio de la gasolina se liberó desde hace tres años. Eso quiere decir que se fija como oferta y demanda y ya no lo administra el gobierno". El también extitular de Desarrollo Social (Sedesol) intentó detallar: "Si el precio del petróleo sube y, en consecuencia, el precio de la gasolina sube, pues tendrá que explicar Andrés Manuel cuántas escuelas, programas sociales, programas de gobierno, cómo seguiría enfrentando el reto de la seguridad en ausencia de los recursos que tendría que estar dedicando a subsidiar".