CIUDAD DE MÉXICO (apro).- El primer contingente del Viacrucis del Migrante en Lucha llegó la mañana de ayer a la frontera de Baja California. Son 120 personas, la mayoría de Honduras. La caravana es coordinada por Christan Call, un activista estadunidense de Tenesse que desde 2004 trabaja con migrantes guatemaltecos y también participó en los dos viacrucis de 2017. Tras destacar que por primera vez no tuvieron percances con las autoridades y tampoco con delincuentes, Call se manifestó confiado de que la Guardia Nacional de Estados Unidos cumpla con tratados internacionales en materia de asilo. De igual manera, informó que una caravana de activistas estadunidenses salió de Los Ángeles, California, para coincidir con ellos el próximo sábado 28 en la frontera de Tijuana. Carlos Antonio Aguilera Serna, un comerciante de maní con dulce, originario Choruteca, Honduras, quien viaja con sus tres hijos y su esposa, asegura que él y su familia migraron por la violencia de los maras y el golpe de Estado en su país. A su vez, Elim Orellana, comerciante salvadoreña de 29 años de edad y con cinco meses de embarazo, señala que huyó de su país por la violencia y las amenazas de muerte de las pandillas que le cobran piso por sus ventas. La última vez, dice, le quitaron 2 mil dólares. Antes de cruzar el Río Colorado se tenía un censo de 615 migrantes, entre ellos dos embarazadas, 96 menores de 15 años, incluidos seis bebés, y tres adultos mayores. Por las dimensiones del contingente se les asignó espacio en tres albergues del centro de Mexicali, Baja California: Hotel del Migrante, Alfa Omega y Covina Posada del Migrante. Sin embargo, todo el grupo decidió continuar a Tijuana la tarde de ayer, para continuar su viaje a Estados Unidos en tres autobuses que los llevarán a un albergue cercano a la garita, según información difundida por Lindero Norte.