COLIMA, Col. (apro).- Una niña de diez años de edad y su padre murieron este jueves en un ataque armado cerca de un plantel escolar de la ciudad de Tecomán, mientras que la madre de la menor resultó lesionada y un niño salió ileso. En tanto, durante la madrugada, en una brecha del municipio de Villa de Álvarez, fue localizado el cuerpo de una mujer ejecutada, de cerca de 40 años, con heridas de arma de fuego. Según información preliminar, el atentado de Tecomán ocurrió cuando los miembros de la familia viajaban en una camioneta por el rumbo de la secundaria “Gregorio Torres Quintero”, alrededor de las tres de la tarde, y fueron sorprendidos por pistoleros que les dispararon desde otro vehículo. El suceso provocó momentos de pánico entre alumnos profesores y padres de familia que en esos momentos se encontraban en la escuela. Aunque las autoridades policiacas desplegaron un operativo en la zona y en las salidas de la ciudad para tratar de detener a los asesinos, horas después no se había informado nada al respecto. Por otra parte, a un costado de la carretera que conduce a El Espinal se produjo el hallazgo del cadáver de la mujer asesinada que, de acuerdo con las heridas visibles, recibió varios disparos de arma de fuego. La víctima fue abandonada sobre una brecha de terracería, lugar hasta el que llegaron los peritos de la Procuraduría General de Justicia del Estado (PGJE) y el personal del Servicio Médico Forense (Semefo) para registrar la escena, levantar evidencias, así como el cuerpo para realizar la necropsia de ley correspondiente. Según datos del Secretariado Ejecutivo del Sistema Nacional de Seguridad Pública (SESNSP), durante el primer trimestre de 2018 se registraron 191 homicidios dolosos en el estado de Colima, 70 de ellos en enero, 60 en febrero y 61 en marzo, que hasta ahora representa una proporción un poco menor del total de asesinatos ocurridos a lo largo de 2017, que fueron 816. Durante los dos últimos años, de acuerdo con las cifras oficiales, Colima se ha mantenido en el primer lugar nacional en la tasa de homicidios dolosos por cada cien mil habitantes, por encima de estados como Guerrero, Chihuahua, Sinaloa y Baja California.