CIUDAD DE MÉXICO (proceso.com.mx).- El Real Madrid se proclamó tricampeón de la Liga de Campeones al imponerse por 3-1 al Liverpool, en Kiev. El conjunto español se confirma así como el equipo más ganador del certamen continental, con 13 títulos. Con su triunfo, el Real Madrid disputará el Mundial de Clubes, que también jugarán las Chivas del Guadalajara, en diciembre, en Emiratos Árabes. La histórica final de la Liga de Campeones tuvo dos momentos que resultaron determinantes en el desarrollo del juego: la temprana lesión de la estrella del Liverpool, el egipcio Mohamed Salah –quien está en duda para el Mundial- y el par de yerros del guardameta alemán del club inglés, Loris Karius, que se convirtieron en goles del conjunto merengue. Las anotaciones del equipo español fueron obra del francés Karim Benzema y de Gareth Bale, quien salió de la banca y 2 minutos después clavó un espectacular gol de chilena que le dio la ventaja al Real Madrid. El propio Bale sentenció el juego, gracias a un zurdazo de media distancia cuyo balón se le escapó de las manos al guardameta de los ingleses. Carvajal, por el Real Madrid, también salió lesionado al minuto 34, apenas 5 minutos después de Salah. Ambos abandonaron el campo de juego entre llantos de impotencia. El reloj registraba el minuto 25 cuando Salah forcejeó con el capitán merengue Sergio Ramos. Ambos cayeron al césped, pero la peor parte se la llevó el egipcio, pues todo el peso del cuerpo del español quedó encima de su hombro. Todavía, Salah intentó seguir. Sin embargo, a los 34 minutos pidió su cambio entre sollozos. Los primeros reportes médicos señalan de una dislocación del hombro, lo que dejaría a la estrella egipcia fuera de la Copa del Mundo Rusia 2018, a tres semanas del arranque de la competencia. La baja de Salah condicionó el juego del Liverpool, que inició con la posesión del esférico y por ende con el control de las acciones. Para completar, el portero Karius intentó salir en corto, pero Benzema metió la pierna derecha, suficiente para que el balón terminara en las redes del Liverpool al minuto 50. Todavía el senegalés Sadio Mané emparejó la cuenta al minuto 55. Pero desde la banca del Real Madrid surgió el héroe del partido. Gareth Bale, a quien algunos daban por segura su salida del conjunto español, polarizó la atención con el doblete, pero principalmente por la chilena al minuto 63. Aunque todavía Mané impactó el balón en el poste a los 70 minutos, el bombazo de Bale se le escapó sorprendentemente al portero del Liverpool a los 83 minutos. Hubo de todo. Al final un espontáneo entró a la cancha casi al tiempo del silbatazo que dio el tricampeonato al conjunto blanco. Al finalizar del juego, la estrella portuguesa Cristiano Ronaldo dejó abierta la posibilidad de una salida del conjunto español: “Fue muy bonito estar en el Madrid”, y añadió que “en los próximos días daré una respuesta”.