CIUDAD DE MÉXICO (apro).- Conforme avanzan las horas y las labores de rescate, aumenta la cifra de víctimas mortales tras la erupción del Volcán de Fuego de Guatemala. Según el más reciente balance oficial de esta mañana de lunes, ya son 62 las personas muertas, alrededor de 46 las heridas, más de tres mil las evacuadas y dos millones las que han resultado afectadas. Entre los muertos se encuentra un empleado de la Coordinadora Nacional para la Reducción de Desastres de Guatemala (Conred) quien estaba planificando la evacuación de una vivienda. Tres personas más fallecieron por graves quemaduras en la carranca de Lajas. En cuanto a los heridos, al menos 12 son niños y cuatro de ellos tienen quemaduras de tercer grado, por lo que las autoridades debieron trasladarlos al Hospital Roosevelt, de la capital. La aldea El Rodeo, en el departamento sureño de Escuintla, prácticamente quedó enterrada por la avalancha que descendió del cono volcánico. La autoridad señaló que en ese poblado el panorama es "bastante delicado" porque la lava no deja entrar. Además de la cifra de víctimas, hay un número indeterminado de desaparecidos y tres mil 100 personas han sido evacuadas, mientras se realizan evaluaciones de los daños causados por la erupción del volcán de Fuego. Las labores de búsqueda de víctimas y sobrevivientes, continúan David de León, portavoz de la Coordinadora Nacional para la Reducción de Desastres, refirió que hasta las 21:00 hora local del domingo, 653 personas se encontraban en albergues (378 en el departamento de Escuintla y 275 en Sacatepéquez). Esta mañana la cifra de albergados se elevó a mil pus también se inatalaron albergues en Chimaltenango, otra de las zonas más afectadas. El volcán se ubica entre los departamentos de Escuintla, Chimaltenango y Sacatepéquez, 50 kilómetros al oeste de la capital y esta erupción ya obligó a las autoridades a cerrar el aeropuerto internacional La Aurora. La erupción del Volcán de Fuego, dejó a 1.7 millones de personas afectadas informaron las autoridades de Guatemala, quienes consideraron este acontecimiento como “el más devastador” de los últimos años. EFE