CIUDAD DE MÉXICO (apro).- Con otra convincente actuación, Rusia hilvanó su segundo triunfo en igual número de juegos y tiene prácticamente asegurado un lugar en octavos de final, tras imponerse a Egipto por 3-1. Por los egipcios descontó su estrella Mohamed Salah con un penalti que fue señalado por el VAR. No obstante, su equipo tiene un panorama demasiado complicado: requiere que Arabia Saudita, que fue goleado por el anfitrión en el arranque del Mundial, supere a Uruguay. Para Salah, ausente por lesión en el debut de Egipto, fue su estreno en el Mundial con una discreta actuación. Todo se resolvió en un cuarto de hora y luego de un primer tiempo con dominio alterno en la Arena Zenit de San Petersburgo, en la parte complementaria el juego tomó curso. Apenas al minuto 47, Zobnin remató desde afuera, el balón rebotó en Ahmad Fathy. Con el autogol los locales tomaron la delantera, que fue definitiva. Salah intentó un remate que fue rechazado por la defensa. Inmediatamente, el mediocampista Denis Cheryshev alargó la diferencia al rematar una diagonal retrasada, al minuto 59. Fue la tercera anotación de este jugador, quien ya alcanzó al portugués Cristiano Ronaldo en el liderato de goleo. Tres minutos después, Artem Dzyuba bajó el balón con el pecho y, tras eludir la marca, sentenció el juego, luego de un largo servicio de su portero. Rusia acumula seis puntos en el Grupo A, con una diferencia de +7 goles. Su pase a octavos se definirá mañana, luego del partido entre Uruguay y Arabia Saudita.