CIUDAD DE MÉXICO (apro).- Un error del portero Fernando Muslera sentenció la derrota de Uruguay 2-0 ante Francia, que calificó a las semifinales de Rusia 2018, por primera vez desde 2006. Sin Cavani, Uruguay fue un rival disminuido. El entrenador Óscar Tabárez contó con un equipo aguerrido, pero con menor calidad técnica que los franceses y que generó pocas oportunidades de gol. Y en la más clara, Hugo Lloris tuvo un lance espectacular en un cabezazo de Martín Cáceres que pudo haber cambiado el rumbo del partido. El primer gol del encuentro cayó al minuto 40. Antoine Griezmann cobró un tiro libre que Varane remató de cabeza. El 1-0 que sacudió a los charrúas. Casi de inmediato llegó el cabezazo potente de Cáceres y la oportuna intervención de Lloris que se extendió hacia su derecha y desvió con el puño. Tras el descanso, la situación no mejoró para los uruguayos. Ya con un planteamiento más defensivo. Si acaso un disparo de Cáceres en centro de Luis Suárez que se fue por encima del travesaño. La desesperación se pintó de celeste. Entonces, el error del arquero multimundialista. Desde fuera del área, Griezmann prendió de zurda un balón que Muslera intentó atajar, pero se le escurrió sobre las manos. El delantero francés ni siquiera lo festejó. En su camino a la final de Rusia, Francia ya eliminó a Argentina y Uruguay, y su próximo rival será el ganador del encuentro Brasil-Bélgica. Francia no ha perdido en sus últimos 10 partidos mundialistas ante rivales sudamericanos: 6 triunfos y 4 empates. La última ocasión que cayó fue ante Argentina en 1978. Con la caída de los charrúas, el futbol latinoamericano sobrevive sólo con Brasil, favorito para coronarse por sexta ocasión en un Mundial.