CIUDAD DE MÉXICO (apro).- El sector automotriz puso sobre la mesa la agenda de trabajo que presentará al equipo de transición del virtual presidente electo, Andrés Manuel López Obrador, en la que pidió enfocar los esfuerzos en la inseguridad y la creación de una plataforma que sustituya al Registro Público Vehícular (Repuve). En rueda de prensa, los presidentes de la Asociación Mexicana de la Industria Automotriz (AMIA), Asociación Mexicana de Distribuidores de Automotores (AMDA), Asociación Nacional de Productores de Autobuses, Camiones y Tractocamiones (ANPACT) y la Industria Nacional de Autopartes (INA) presentaron el documento “Diálogo con la Industria Automotriz 2018-2024”. El líder de la ANPACT, Miguel Elizalde, señaló: “Tenemos que mejorar los niveles de seguridad para el transporte de vehículos y autopartes en las carreteras y vías de ferrocarriles nacionales. Es un tema importante, no sólo para la industria automotriz, sino para toda la industria, si se está viendo afectada en las cadenas de proveduría, de reparto y distribución, inclusive en hacer llegar los vehículos nuevos a las distribuidoras, es un tema importante que se debe atender”. Otro de los temas importantes para el sector automotriz es el Repuve, el cual Elizalde consideró que “no puede ser que en seis años no se haya podido consolidar. Estuvo acéfalo varios años, creemos que hay un área de oportunidad enorme”. De acuerdo con el empresario, el gobierno entrante deberá formar una plataforma eficiente donde sea el responsable de las estadísticas de venta de vehículos, vía el emplacamiento. Según el documento, en 2017 la industria automotriz contribuyó con 2.9% del PIB nacional y 18.3% del manufacturero. Además de  generar impactos en 157 actividades económicas del país, 84 corresponden a la industria manufacturera y 73 a comercios y servicios. De hecho, en el periodo 2000-2017, el sector automotor recibió 60 mil 677 millones de dólares de Inversión Extranjera Directa; la fabricación de partes para vehículos automotores por 30 mil 228 millones de dólares y la fabricación de automóviles y camiones atrajo un total de 20 mil 775 millones de dólares. Los líderes del sector también pidieron transparencia y combate a la corrupción, especialmente en el caso de los vehículos pesados con la supervisión normativa, así como promover acciones que eviten el contrabando y la informalidad. Otro de los temas fue eliminar las barreras de logística para transportar autopartes en el país, como el funcionamiento de los puertos para fomentar la exportación de los vehículos; demás de la simplificación del marco legal, evitando la duplicación de criterios diferenciados.