GUANAJUATO, Gto. (proceso.com.mx).- En uno de los episodios más violentos del año en el estado, al menos 27 personas fueron asesinadas en 24 horas entre el jueves y el viernes, en ocho municipios de Guanajuato. Los incidentes incluyen tres incursiones a domicilios particulares y a un bar en Apaseo el Grande, Tarimoro y Acámbaro, respectivamente, en los que sicarios irrumpieron y dispararon contra quienes se encontraban en esos sitios. Cuatro de los homicidios fueron cometidos en Valle de Santiago, todos los cuerpos fueron abandonados en carreteras y dos en un camino vecinal, éstos identificados por sus familiares como campesinos; cuatro víctimas más fueron abatidas en un ataque a una vivienda de la colonia El Cerrito en Tarimoro, entre ellos una pareja de jóvenes –la mujer de 22 años fue asesinada cuando estaba en su cama-. En Apaseo el Grande tres hombres fallecieron, mientras que una mujer y otro hombre quedaron gravemente heridos tras la irrupción de sicarios en una casa. Los sicarios entraron hasta el fondo de la vivienda y ahí cometieron la masacre. En Irapuato, en distintos hechos se registraron cuatro víctimas mortales, dos de ellos en un taller mecánico en el fraccionamiento La Paz –entre estos el propietario del mismo- y un migrante residente en los EU que se encontraba de visita en la ciudad; dos más en Salvatierra, mientras que en Yuriria y en Purísima del Rincón se cometieron dos homicidios violentos. En Acámbaro, dos cabezas humanas fueron colocadas en el acceso principal de la ciudad, con cartulinas presuntamente firmadas por el Cártel Jalisco Nueva Generación, mismo que, según han reconocido las autoridades estatales y federales, mantiene una férrea pugna con el denominado Cártel de Santa Rosa (asentado en esa comunidad de Villagrán), principalmente en el Sur del estado. Las cabezas con el mensaje fueron colocadas a un costado el monumento al ferrocarril. Otras tres personas fueron asesinadas en Acámbaro, donde también se dio el ataque armado a un centro botanero de la colonia Rancho Grande, en la madrugada del viernes. En Salvatierra, un hombre que había sido sacado violentamente de su domicilio fue asesinado entro del panteón de Santo Tomás Huatzindeo –donde semanas atrás sujetos dispararon contra un cortejo fúnebre- y otro hombre, también asesinado por arma de fuego, fue abandonado a un lado de la carretera a la comunidad del Sabino. En Salamanca, uno de los municipios con más altos índices de homicidios dolosos, se encontró el cuerpo de una persona con heridas de bala, amarrado de los brazos, en un camino comunal. En Yuriria, una mujer fue asesinada dentro de un inmueble en la colonia La Aldea, cuando se encontraba en su cama; en el sitio se encontraron pipas para el consumo de drogas, informó la Procuraduría de Justicia.