Ataque armado deja tres muertos y tres heridos en base de transporte público en Chilpancingo

domingo, 29 de julio de 2018 · 12:59
CHILPANCINGO, Gro., (proceso.com.mx).- Tres personas asesinadas y tres más heridas fue el resultado de un ataque armado, registrado esta mañana, contra civiles que estaban en la base de transporte público de la ruta Chichihualco-Chilpancingo. Este ataque ocurre a unas horas de que el gobernador Héctor Astudillo Flores anunciara que se reforzará la seguridad en la región Centro, donde la Secretaria de Seguridad Pública estatal y el Ejército tienen identificada una brutal confrontación entre los grupos delictivos denominados cartel del Sur, Los Rojos y Los Ardillos afincados en Chichihualco, Chilpancingo, Chilapa y Quechultenango. Además, los permisionarios de este sitio decidieron cerrar “hasta nuevo aviso”, esta ruta de transporte que conecta la región Centro con la Sierra como lo hicieron desde hace dos días, transportistas de la vía Chilpancingo - Chilapa. De acuerdo a testigos, el atentado fue directo contra la base de Chichihualco, donde fue alcanzada una unidad que salía con los pasajeros rumbo a la zona de la Sierra. Los reportes oficiales indican que el atentado de este domingo dejó cuatro personas heridas, identificadas como Aarón, de 13; Beatriz Adriana, de 35 y Sebastián de quien no se especificó la edad. Mientas las víctimas fatales son: María Rosario, de 40 años; Abraham Isidro, de 75 años de edad, y Elías Pólito, de 80 años, quien falleció en el hospital general de esta capital. En esta semana se han registrado tres ataques armados contra los sitios de transporte público de las rutas que conectan Chilpancingo con los poblados de Chilapa y Chichihualco, los cuales han dejado un saldo de cuatro personas muertas, cuatro más heridas y tres unidades destruidas, dos de ellas incendiadas. Ambos sitios de transportistas donde diariamente viajan cientos de personas que realizan actividades comerciales, laborales y turísticas en la Sierra y la Montaña baja de la entidad, se ubican en la misma zona del mercado central de esta capital sobre la calle Insurgentes, donde permanecen apostados soldados, policías estatales y federales.

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