CIUDAD DE MÉXICO (apro).- El Colegio Enrique Rébsamen, uno de los principales inmuebles destruidos por el sismo del 19 de septiembre de 2017, entró este lunes en su segunda etapa de demolición. El plantel -en el que murieron 26 personas, entre ellas 19 niños- estaba conformado por tres edificios. Uno de ellos colapsó, otro quedó severamente dañado y un tercer edificio, de estructura metálica, no presentó afectaciones. En un comunicado, la Secretaría de Obras y Servicios (Sobse) del Gobierno de la Ciudad de México informó que los trabajos iniciados este lunes consistirán en la demolición y retiro de escombro del resto de la estructura colapsada, área aprobada y liberada por la Procuraduría General de Justicia de la CDMX (PGJCDMX). La primera etapa de trabajos en el Colegio Rébsamen tuvo una duración de 18 días. El derribo realizado fue una sección del edificio colapsado y en esta segunda etapa se terminará de demoler. Se prevé que este proceso concluya en cuatro semanas. Un equipo de topógrafos se enfocará al monitoreo constante del comportamiento de los inmuebles aledaños, como medida de seguridad para los ciudadanos que viven alrededor del centro educativo, informó la dependencia. Añadió que todas las actividades se realizarán dentro del plantel educativo para no afectar la vialidad. Además informó que un equipo de peritos supervisará la demolición controlada en todo momento y se contará con la presencia de representantes de la PGJCDMX, la Fiscalía que revisa el caso y la Secretaría de Protección Civil, así como de una comisión conformada por los padres de familia y sus representantes legales.