CIUDAD DE MÉXICO (apro).- En la Casa Blanca, el juez Brett Kavanaugh juró una vez más a su cargo como nuevo integrante de la Suprema Corte de Justicia de Estados Unidos, y el presidente Donald Trump aprovechó el acto para cuestionar lo que llamó “una campaña de destrucción personal” orquestada por sus opositores. El acto fue transmitido en video en la cuenta de Twitter de Trump y en la página oficial de la Casa Blanca. "Bajo escrutinio histórico probó ser inocente", aseguró Trump al referirse a un reporte del FBI en el que no se presentaron pruebas de las denuncias formuladas por la doctora Christine Blasey Ford contra el juez, a quien acusó de un ataque sexual presuntamente perpetrado en 1982. En Washington, Trump dijo que Kavanaugh enfrentó un sufrimiento terrible y le ofreció disculpas tanto a él como a su familia. “En nombre de todo el país, quiero disculparme con Brett y con toda la familia Kavanaugh por el dolor y sufrimiento que han tenido que pasar”, dijo en alusión al proceso de su nombramiento, en el que el juez enfrentó las acusaciones de Blasey Ford y otras dos mujeres. Lo que le ocurrió, expresó Trump, “viola cualquier noción de justicia, decencia y debido proceso”. Los otros ocho jueces de la Corte estuvieron presentes para la juramentación del lunes, un acto totalmente ceremonial. Kavanaugh juró a su cargo el pasado sábado, tras ser electo en el Senado estadunidense por estrecho margen. Ahora, el máximo tribunal estadunidense cuenta con una mayoría de cinco ministros conservadores contra cuatro de filiación más liberal.