CIUDAD DE MÉXICO (apro).- El presidente Enrique Peña Nieto calificó de “inédito” que un numeroso contingente de migrantes, en su intento por ingresar a México de manera irregular, agredió y lesionó a elementos federales, que iban desarmados. Los agentes de la Policía Federal (PF), con base en el marco legal, contuvieron al contingente y restablecieron las condiciones de orden en la intersección de Ciudad Hidalgo, Chiapas, y Tecún Humán, Guatemala, sostuvo el mandatario en un mensaje.

“Los integrantes de la caravana podrán solicitar el ingreso por las vías que establecen nuestras leyes y el derecho internacional”.

Afirmó que México, como país soberano, no permite ni permitirá el ingreso de migrantes a su territorio de manera irregular y mucho menos de manera violenta. “El ingreso violento al país no sólo atenta contra nuestra soberanía, también pone en riesgo a los propios migrantes, especialmente a niñas, niños, mujeres y adultos mayores". Dijo que las secretarías de Gobernación y Relaciones Exteriores tienen la orden de mantener el diálogo con la caravana para garantizar las condiciones de seguridad y derechos humanos. Nuestras leyes ponen al migrante y a la protección de sus derechos humanos en el centro, señaló, y agregó que el gobierno busca que la migración sea segura, regular y ordenada. Sostuvo que el embajador mexicano en Guatemala les comunicó a los centroamericanos, en todo momento, que serían recibidos en el país bajo el procedimiento ordenado previsto en la legislación. Recordó que toda persona que deseara entrar a territorio nacional podría hacerlo, siempre y cuando contara con documentos de viaje y una visa concedida por México. De igual manera se informó que podrían solicitar, de manera individual, el reconocimiento como “refugiado”. “En estos términos, inició el ingreso ordenado a nuestro país, de decenas de personas que son atendidas por el Instituto Nacional de Migración (INM)”.